El Ministerio del Interior (MI) presentó una rendición de cuentas sobre las políticas contra la violencia basada en género, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer.
Según las cifras difundidas por el MI, en los últimos diez años las denuncias por violencia doméstica pasaron de 29.785 a 35.443, en comparación a los primeros diez meses de 2015 con el mismo período de 2025, lo que representa un incremento del 19%.
Del 100% de los casos denunciados, en el 61% el indagado es la pareja o la expareja, mientras que el 39% es otro familiar de la víctima. En los casos en los que las víctimas son mujeres, el 70%, la violencia física se encuentra en un 42% de las denuncias, la violencia psicológica en un 30%, la violencia vicaria en un 14%, la violencia digital en un 9%, mientras que la violencia sexual representa un 3% de los casos de violencia doméstica denunciados.
En el caso de los hombres víctimas de violencia doméstica, que representan un 30%, en el 56% de los casos hay violencia psicológica, en el 31% violencia física, en el 5% violencia digital y en otro 5% violencia patrimonial y económica. En el caso de las mujeres víctimas de violencia doméstica, en el 48% de los casos tienen entre 18 y 38 años, mientras que en el caso de las víctimas varones el 40% tiene entre cero y 17 años. Entre los indagados por violencia doméstica, el 75% son varones y el 25% son mujeres, en su mayoría entre 18 y 38 años.
En las denuncias por delitos sexuales, el 81% de las víctimas son mujeres y el 19%, hombres. En el caso de las mujeres, el 58% de las víctimas tienen entre seis y 17 años; en el de los hombres, el 82% tiene entre cero y 17 años. El 89% de las personas indagadas por delitos sexuales son hombres, mientras que el 11% restante son mujeres. En cuanto a los casos de violencia digital, el 83% de los indagamos son hombres y el 17%, mujeres.
Con relación a los homicidios por violencia basada en género, el informe señala que en los últimos diez años, comparando de enero a octubre de cada año, los casos oscilaron entre 16 (2025) y 24 casos (2022). El informe revela que en el 56% de los casos convivían con el autor del femicidio, mientras que en el 38% habían convivido. En el 75% de los casos no había denuncias previas; en el 67%, el femicida no tenía antecedentes penales. Respecto de la situación del indagado, en el 60% de los femicidios los victimarios fueron imputados y en el 40% se suicidó.
El evento en el que se presentó la rendición de cuentas tuvo lugar en la Torre de las Comunicaciones y fue abierto por la subsecretaria del Interior, Gabriela Valverde, quien señaló que la violencia basada en género es “una realidad que atraviesa hogares, territorios y generaciones”, y destacó las políticas del Ministerio para fortalecer la atención y generar mecanismos de protección a las víctimas y sistemas tecnológicos de monitoreo, además de diferentes instancias de capacitación de la policía, para ajustar procedimientos y formar equipos específicos para este tipo de violencia.
Valverde hizo hincapié en los cambios en materia de formación policial. “Incorporamos la perspectiva de género en forma estructural en la educación policial [...] Nuestra policía necesita, y ya está construyendo, herramientas más humanas, más profesionales y más sensibles”, señaló. “Estamos andando con rigor técnico, sensibilidad social, responsabilidad pública y la convicción profunda de que un país sin violencia es posible”, concluyó la subsecretaria.
Al cierre del evento, el ministro del Interior, Carlos Negro, subrayó la “responsabilidad y el compromiso inquebrantable” del MI y señaló que en los primeros ocho meses de gestión la prevención, investigación y persecución de los delitos de violencia basada en género son la muestra de ese compromiso. “Nuestra voluntad política es inquebrantable, la seguridad es un derecho [...] Continuaremos trabajando con la sensibilidad que merece un cambio cultural y social de la magnitud que nos proponemos”, expresó.