La Comisión Interna del Hospital de Maldonado emitió un comunicado en el que manifestó “incertidumbre” ante el anuncio de reducción de camas y carga horaria de los funcionarios en el Centro de Tratamiento Intensivo (CTI) polivalente. Frente al reclamo, el presidente de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Leonardo Cipriani, se reunirá con los dirigentes de la Federación de Funcionarios de Salud Pública este jueves a las 19.00 en Maldonado.
Con motivo de la emergencia sanitaria por covid-19, el 10 de enero de 2021, ASSE amplió la capacidad del CTI de Maldonado, que pasó de tener ocho a 15 camas. Durante la inauguración, Cipriani aseguró que las camas “vinieron para quedarse”, en una rueda de prensa. Sin embargo, en enero de 2022, la Unidad de Negociaciones de la cartera anunció que los médicos intensivistas y funcionarios deberán cumplir la mitad de la carga horaria semanal (20 horas) en Rocha, donde se prevé la creación de un nuevo CTI.
La Comisión Interna del Hospital de Maldonado señaló que, de ejecutarse la medida, el departamento volvería a tener el número de camas que había antes de la pandemia, habría una pérdida de puestos laborales y una baja en la calidad del servicio. “No estamos en contra de que abran un CTI en Rocha. Al contrario. Lo que no queremos es que nos saquen las camas de acá”, aclaró.
En una carta enviada a la Sociedad Uruguaya de Medicina Intensiva, la comisión expresó: “Nos sorprendió y nos preocupó dado que no todos podemos viajar entre 84 y 100 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta, pagar el combustible, el peaje, y [también está] el tema del desgaste del vehículo”.
En el momento más álgido de la pandemia se registró un máximo de ocupación de 21 camas en el CTI de Maldonado. Actualmente, se utilizan entre ocho y 14 camas, señalaron desde la Comisión Interna del Hospital de Maldonado.
Los funcionarios defendieron que mantener el número de camas evita tener que internar a los usuarios en centros de salud privados, algo que “encarece” los gastos de ASSE y de las familias. Este hecho se ve agravado cuando se requieren traslados a otros departamentos debido a los costos de pasajes, hospedaje y alimentación.
El Hospital de Maldonado cuenta con unos 75.000 usuarios afiliados, en tanto que el Hospital de Rocha asiste a unas 32.000 personas, compararon. Por otra parte, evaluaron que el Hospital de Rocha no cuenta con la infraestructura necesaria para incluir nuevas camas de CTI y observaron que no brinda servicio a pacientes cardiológicos, politraumatizados ni a quienes precisan hacerse diálisis, sino que son derivados a Maldonado.
Además, los funcionarios indicaron que si se cierra el CTI, 45 enfermeros auxiliares y médicos verían “mermados sus ingresos o perderían su trabajo”. Sobre este punto, la presidenta de la Comisión Interna del Hospital de Maldonado, Adriana Lorenzo, informó que, en la última negociación con ASSE, lograron extender los contratos hasta mayo.
Según dijo Lorenzo a FM Voces, un gran porcentaje del personal es contratado mediante la modalidad “068”, que se rige por la reglamentación privada y que se renueva cada tres meses, lo que genera “inseguridad laboral, tareas insalubres, falta de recursos humanos y un presupuesto muy acotado y recortado”.
En búsqueda de apoyo, este miércoles los integrantes de la comisión se reunieron con el diputado frenteamplista de Maldonado, Eduardo Antonini. También programaron reuniones para la próxima semana con los diputados Rodrigo Blás y Diego Echeverría (Partido Nacional), Eduardo Elinger (Partido Colorado) y Sebastián Cal (Cabildo Abierto), así como con las bancadas de ediles de la Junta Departamental de Maldonado.