Mundo Ingresá
Mundo

Alejandro Toledo, expresidente peruano, el 21 de octubre, durante una audiencia judicial en Lima.

Foto: Renato Pajuelo, AFP

Perú: El expresidente Alejandro Toledo fue condenado a 20 años de prisión por recibir coimas de la empresa constructora Odebrecht

2 minutos de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

El exmandatario, a quien se acusa de recibir 35 millones de dólares en sobornos, pidió que “no lo dejen morir en la cárcel”.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

La Justicia de Perú condenó al expresidente Alejandro Toledo a 20 años y seis meses de prisión por los delitos de colusión agravada y lavado de activos en el caso Interoceánica Sur.

De acuerdo con la sentencia, Toledo, quien fue mandatario peruano entre 2001 y 2006, fue hallado culpable de haber aceptado sobornos de parte de la empresa constructora brasileña Odebrecht en contraprestación de licitaciones para construir dos tramos de la carretera Interoceánica Sur, que conecta la costa del Pacífico de Perú y la del Atlántico de Brasil.

Según lo que informó Perfil, el tribunal, presidido por la jueza Zaida Pérez, le impuso al exmandatario nueve años por el delito de colusión y 11 años y seis meses por el de lavado de activos. Toledo, de 78 años, expresó en su alegato final que tiene cáncer y problemas cardíacos, por lo que les pidió a los jueces que “no lo dejen morir en la cárcel”. “Tengo cáncer y problemas en el corazón. Quiero ir a una clínica privada, les pido por favor, déjenme curar o morir en mi casa”, afirmó.

Tras escuchar la sentencia, el exmandatario fue enviado inmediatamente al Penal de Barbadillo, situado en el distrito de Ate, en Lima, donde permanecerá hasta octubre de 2043. Toledo está preso de manera preventiva en ese lugar desde abril de 2023, cuando, luego de estar prófugo, se entregó a las autoridades de Estados Unidos, que procedieron a deportarlo.

El Penal de Barbadillo es coloquialmente denominada “la cárcel presidencial”, porque allí, además de Toledo, está recluido el exmandatario Pedro Castillo, acusado de malversación de fondos e intento de golpe de Estado. Antes dicho centro penitenciario fue ocupado por el recientemente fallecido Alberto Fujimori y también por otro expresidente peruano, Ollanta Humala.

De acuerdo con lo que informó el diario limeño La República, el abogado defensor de Toledo, Roberto Su, comunicó que apelará la decisión de la Justicia y dijo esperar que esta pueda ser revisada en una segunda instancia para poder así reducir la pena sobre su cliente.

El coordinador del Equipo Especial de Lavado de Activos, Rafael Vela, al ser consultado por el medio antes mencionado, dijo que habría posibilidad de que se rebaje la pena en caso de que los defensores legales de Toledo acudan a una instancia superior. “En este colegiado ya no se puede reducir la pena de Alejandro Toledo, pero si va a una instancia superior, a través de una apelación, sí, dicha sala puede anular, disminuir o confirmar la pena”, expresó Vela. Medios peruanos informaron que, en el momento de escuchar su sentencia, Toledo se mostró calmado y que ocasionalmente sonreía mientras hablaba con su abogado.

La pena impuesta por la Justicia peruana al expresidente será computada a partir del 23 de abril de 2023, por ende, culminará el 22 de octubre de 2043. También, el Tribunal determinó que no habrá suspensión de la pena debido a que Toledo fue extraditado, lo que causó daños al Estado peruano por los gastos en los que debió incurrir para lograr juzgarlo.

Con esta sentencia, Toledo se convierte en el primer expresidente de Perú en ser sentenciado por el caso Lava Jato, la red de corrupción que alcanzó a funcionarios y políticos de varios países de América Latina.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

¿Te interesa el acontecer internacional?
None
Suscribite
¿Te interesa el acontecer internacional?
Recibí el newsletter Mundo en tu email.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura