El titular de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, y el subsecretario, Daniel Garín, fueron los primeros en asumir. Aguerre, que estará en el lugar que el presidente ocupó al comienzo del gobierno de Tabaré Vázquez, dijo que no soñaba con la designación “hasta hace 65 días”. Mujica reconoció que “no la pensaba ni Mandrake”, pero añadió que “hacía mucho que lo venía pastoreando” (a Aguerre) en sus actividades y quería dar una “señal fuerte al agro nacional”. “Espero mucho, nos jugamos la ropa”, le dijo al nuevo ministro. Éste afirmó que Uruguay tiene una capacidad de producción para 50 o 60 millones de habitantes y que el agro “fue, es y será” determinante en el modelo de desarrollo.
“La oportunidad que tiene como negocio es formidable. Hoy el mundo está preocupado por alimentos, agua, biocombustibles y por generar modelos de producción sustentables. Ahí radica la mayor oportunidad como país, que no se puede dejar pasar. La competitividad de los productos agropecuarios se puede medir en tres niveles: la empresa, la cadena y el país. Y en los tres niveles este Ministerio tiene un rol a jugar”, indicó. A nivel educativo, Mujica se dirigió a los veterinarios y les pidió que, en caso de que decida fundar una Facultad de su rama en el interior, “no piensen que les quitarán el trabajo, todo lo contrario”.
El área uniformada
Luis Rosadilla asumió en el Ministerio de Defensa Nacional junto con el subsecretario, Gabriel Castellá. Como primera medida anunció que las autoridades de su cartera, él incluido, no utilizarán vehículos oficiales para trasladarse a sus domicilios particulares sino que cada uno deberá hacerlo por sus propios medios, como cualquier funcionario.
En cuanto a prioridades, comenzará a trabajar puertas adentro. “No dilapidará” los recursos asignados a esa secretaría y “no admitirá desvíos de ningún tipo”, prometió. En ese sentido anunció que deberán procesarse cambios en la estructura interna, incluyendo un aumento salarial a los funcionarios con miras a mejorar el servicio. Antes de que lo llamen, concurrirá al Parlamento para informar sobre el estado de situación de la cartera e instó a la oposición “a pensar” y “a construir”.
Mujica reflexionó que saldremos de “la prehistoria” cuando no sean necesarias más “armas ofensivas”, calificó a las Fuerzas Armadas de “imprescindibles” y reiteró que procurará una mejora en la calidad de vida de los efectivos militares.
Eduardo Bonomi y Jorge Vázquez son respectivamente el ministro y el subsecretario del Interior. El titular de la cartera la dejará pronto, cuando se cree el anunciado Ministerio de Gobierno, pero presentó un programa “para 20 años” y aseguró que en cinco deberá avanzarse mucho. En materia de seguridad y desde lo conceptual, Bonomi sostuvo que el éxito no es descubrir delitos sino evitar que se cometan. Por eso, adelantó que la prioridad será, mediante una visión integral, trabajar hacia una política de prevención, disuasión, represión y sanción, pero a la vez continuar apostando a las políticas sociales para contener factores determinantes de la marginalidad y la delincuencia.
En cuanto a acciones concretas, indicó que en primer lugar se “elevará el nivel de las comisarías”, para avanzar en gestión de calidad en todas las unidades básicas de la Policía nacional. También considera necesario darle carácter nacional al Regimiento Guardia Republicana, fortalecer la modalidad de Policía Comunitaria en cada comisaría del país y continuar el proceso de reforma del modelo de gestión de las seccionales policiales.
En una segunda etapa, se apuntará a una institución policial como servicio profesional en el que exista planificación, evaluación e investigación; se establecerá un nuevo sistema de trabajo policial; se incorporará tecnología de punta para la investigación criminal; y se trabajará para disminuir el servicio 222 hasta llegar a su eliminación, anunció.
En cuanto a presupuesto, se aspira a alcanzar el doble del actual, con destino prioritario a salarios, construcción de establecimientos carcelarios y mejora de la calidad de vida del personal policial. La primera decisión de Bonomi como ministro fue confirmar en su cargo a la actual directora de la Escuela Nacional de Policía, Cristina Domínguez.
Continuidades
La primera resolución que firmará Ana Vignoli, la nueva ministra de Desarrollo Social, extenderá los pases en comisión durante tres meses para no paralizar programas en funcionamiento como los de Inju e Inmujeres. En cuanto a la designación de la directora de este último instituto, Vignoli dijo a la diaria que “no hay información oficial”. El viernes, una delegación de la Unidad Temática de las Ciudadanas del Frente Amplio entregó una carta a Mujica con cuatro candidatas para el cargo. Vignoli, que será secundada por Lauro Meléndez, bregó por la continuidad de las políticas sociales desarrolladas durante la gestión de Marina Arismendi. Afirmó que trabajará para alcanzar “mejores porcentajes” en la erradicación de la indigencia, disminución de la pobreza y masificación de la educación. “El Mides tiene un papel fundamental y el compromiso es alcanzar el mayor porcentaje que podamos y calidad en las políticas sociales”, indicó.
El titular de Salud Pública, Daniel Olesker, reconoció que recibe un ministerio en “mejores condiciones” que en 2005. El economista socialista, hasta ahora director general de Secretaría del MSP, tendrá en la subsecretaría a Jorge Benegas, del PCU. Ante la mirada de Mujica, el nuevo ministro dijo que la última dictadura militar no pudo “destruir las convicciones”. “Pepe, pudimos más que ellos”, le dijo. Se comprometió a profundizar las políticas sanitarias de la primera administración frentista, que en lugar de una “herencia maldita” dejó una “bendita”, a pesar de que en 2005 recibieron una “salud destruida y un sistema fragmentado, hecho bolsa”. A su turno, Mujica también elogió a las autoridades salientes (con María Julia Muñoz a la cabeza, en el cargo desde marzo de 2005) por la “proeza” de conducir “exitosamente” un ministerio que era “la tumba de los cracks”.
Del discurso pronunciado en el Ministerio de Turismo y Deporte por Mujica quedaron algunos conceptos llamativos. Allí acompañó la asunción, en continuidad, del ministro Héctor Lescano y de la subsecretaria Liliam Kechichian. “Hicimos una excepción”, dijo al referirse a que en esa única cartera los dos principales jerarcas pertenecen al mismo sector político del Frente Amplio, Alianza Progresista. “El Pepe tiene marcha atrás”, afirmó, explicando que fue a pedido de Danilo Astori.
Enfatizó que “no entrará nadie a trabajar en el Estado y menos entrarán por la ventana, que son los que ¡terminan ganando más!”. En la misma línea de pensamiento agregó que “los recursos públicos son sagrados” y que tendría que haber “doble pena para cuando se dilapidan recursos públicos que cuando se dilapidan los privados, porque, de esa manera, perjudicamos a los más indefensos”.
Luego cargó contra el mal uso de los concursos en la administración pública: “Nos estamos mintiendo con el sistema de concursos en tanto el concurso se ha transformado en acomodo, aunque esto no lo digo en general”. Sobre esta temática hizo un último apunte expresando que frente a esta situación, “hasta poner gente a dedo es mejor” que el concurso amañado, en tanto la primera práctica no es “anónima porque da la cara, mientras que lo otro es burocrático”.
Por su parte, Lescano dijo que trabajará para que se apruebe en este período la creación por ley del Ministerio de Deporte, a fin de separar las áreas de las que se encarga la actual secretaría de Estado. Álvaro García, letrista de murga en sus ratos libres, se despidió brevemente del Ministerio de Economía recordando que al presidente le quedaban “como trece tablados más” por recorrer, y pasó la posta a Fernando Lorenzo. El ex asesor de Macroeconomía dijo que sus objetivos serán “los objetivos de todo el gobierno”. “Cuando se nos plantea el desafío de progresar en materia de educación, fortalecer la investigación, avanzar reformas, infraestructura, es un mandato que hacemos nuestro. No queremos ser valorados por otra cosa que por el conjunto de avances que la sociedad realice”, señaló.
Lorenzo (Nuevo Espacio) estará secundado por Pedro Buonomo (MPP), a la cabeza de una “barra joven y nueva”, según dijo Mujica en el acto, después de comentar, causando risas, que ellos serían “los futuros chivos emisarios” y que ya “tenemos el rostro al que le vamos a pegar”.
Empresas y sindicatos
El socialista Roberto Kreimerman, que estará acompañado en el Ministerio de Industria por el ex diputado de la Vertiente Artiguista Edgardo Ortuño, destacó la importancia de los ámbitos interministeriales para coordinar políticas industriales y energéticas. Habló de continuar la línea de acción de la última gestión, anunció “importantes inversiones” en el corto plazo y se comprometió a mejorar la calidad de empleo. Allí Mujica, al igual que en otras visitas, les pidió a los funcionarios un “hondo sentido nacional de compromiso”, y opinó que este ministerio “paga el precio” de las políticas neoliberales de los años 90, cuando se pregonaba que el Estado debía convertirse en “policía y no mucho más que eso”. Para contrarrestar la crisis económica mundial, según el presidente, el mejor “antídoto” es “volver a la política”. Habló también de establecer desde el Estado estrategias en materia energética “a largo plazo”.
Encarar la instalación de la negociación colectiva en el sector público, trabajar por la calificación de los recursos humanos para bajar aun más la tasa de desempleo -que está “por debajo de lo que denominan desempleo estructural”- y relanzar el diálogo sobre la seguridad social serán los primeros desafíos para el ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, que estará acompañado en su tarea por Nelson Loustaunau. Brenta se encontró con la sorpresa de afrontar en su primer día de trabajo la primera ocupación del período. Más de cien trabajadores de Montes del Plata (la fusión de Stora Enso y Arauco) ocuparon los predios de la empresa en Conchillas, pidiendo respuestas claras sobre lo que pasará cuando en las próximas semanas terminen los movimientos de tierra que allí realizan, ya que la empresa todavía no resolvió dónde ubicará la planta de celulosa que proyecta construir en Uruguay.
El ministro comentó que todavía no había tenido que firmar resoluciones, y presentó a su equipo: Julio Baráibar como director Nacional de Trabajo, Juan Andrés Roballo como inspector General de Trabajo, Eduardo Pereyra como director Nacional de Empleo y Luis Álvarez como director del Instituto Nacional de Alimentación.
Ciencia y obras
Al frente de Educación y Cultura estarán Ricardo Ehrlich y María Simon, titular de la cartera hasta ayer. Ehrlich defendió la Ley General de Educación aprobada en 2008, pero dijo que se trata de una herramienta “perfectible” que se constituye como “base de trabajo” para la nueva administración. Señaló a la enseñanza media como uno de “los mayores desafíos del ahora” y anunció que el gobierno potenciará al Instituto Terciario Superior y al Instituto Universitario de Formación en Educación, que fueron creados mediante esa ley. “Los cambios no se hacen con una norma, pero no se hacen sin ella”, reflexionó.
El presidente opinó que la educación “es un tema en que nos va la vida” y reprochó que la juventud prefiera una formación humanística y no científica. “No se puede construir algo sólido que no se construya alrededor de la matemática y la ciencia”, señaló. Y adelantó que no se va a cansar de “machacar” en que es necesaria la “preparación científica” y en que hay que “aprender inglés, porque los chinos están hablando inglés y le van a hablar al mundo en inglés”. Además recordó que hay que “acordarse” del interior del país al momento de diseñar los cambios en la enseñanza porque, hasta el momento, “hacemos cursos de descentralización y les robamos toda la inteligencia”. “¡Qué lucha va a tener este ministerio, y qué lucha vamos a tener!”, expresó.
Antes de iniciar la ceremonia en el edificio de la calle Rincón, se leyó un saludo del ministro saliente de Transporte, Víctor Rossi, para su sucesor, Enrique Pintado, y para el nuevo subsecretario Pablo Genta, ex director del ministerio. Pintado pidió un aplauso para los dirigentes sindicales (él proviene del gremio de la Salud) y los miembros de la oposición que fueron al acto. Estaban, entre otros, el empresario y conductor televisivo Julio Sánchez Padilla; el presidente de Peñarol, Juan Pedro Damiani (Pintado es un notorio peñarolense); y el ex director de la DGI, Eduardo Zaidensztat, que también había estado en la toma de posesión de Lorenzo. “Vine a saludar amigos, pero no voy a ocupar cargos en este gobierno”, dijo Zaidensztat, consultado por la diaria. También se vio en el MTOP a Morgan Martínez, ex dirigente de Nacional y dueño de Concretex; al técnico de Peñarol, Diego Aguirre; y al presidente de CUTCSA, Juan Salgado. Pintado dijo que un “país de primera” requerirá “funcionarios de primera y comprometidos”, habló de trabajar en base a los principios de “ética y transparencia” y anunció mejoras del Sistema de Transporte Metropolitano.
Del mismo palo
En la sede del MVOTMA había figuras de peso del MPP como el senador Ernesto Agazzi -compañero de sector de la nueva ministra Graciela Muslera- y dirigentes de Asamblea Uruguay, sector al que pertenece el subsecretario, Jorge Patrone. La mayoría de los asambleístas recorrieron a pie las pocas cuadras que separan las sedes de Vivienda y de Transporte, después de saludar minutos antes a Pintado, también de su sector. Muslera, que estaba al frente de la Agencia Nacional de Vivienda, destacó “con orgullo” la gestión de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), durante todo el conflicto por la pastera Botnia, a pesar de que su directora, Alicia Torres, no seguirá en esa responsabilidad, que asumirá el ingeniero Jorge Rucks. Se comprometió a construir un “ministerio de puertas abiertas”, que intentará “desterrar el ‘no se puede’ por el ‘es posible’ o ‘lo logramos’”. Mujica reiteró que las políticas de vivienda serán prioridad en su administración y que esa problemática es un “pretexto para empezar a intervenir”.
“Para mí es un día memorable, francamente memorable... llevo trece discursos con éste”, comenzó ironizando Mujica en el que sería el último acto de asunción: el del canciller Luis Almagro y el subsecretario Roberto Conde. Ya en funciones, el ex embajador en China señaló que su prioridad “número uno” será la región, y específicamente Brasil y Argentina. Dijo que otra línea constituyen los países latinoamericanos y luego “la apertura de Uruguay al mundo; Estados Unidos, la Unión Europea, Asia y China específicamente”. En otra línea de trabajo, se reforzará la interinstitucionalidad, dándole “un papel más fuerte” a la Comisión Interministerial de Asuntos de Comercio Exterior, que tendrá como secretario ejecutivo al economista Álvaro Ons.
La primera e inmediata actividad que tuvo que cumplir Almagro fue un encuentro con una delegación del gobierno de Irán, en el que también participó Mujica. Según explicó, en la reunión se abordaron las posibilidades de comercio entre ambos países: Uruguay como productor de arroz e Irán como proveedor de petróleo.
En su último discurso del día, Mujica agradeció a los anteriores ministros de Relaciones Exteriores, y en ellos, a los otros que se fueron ayer: “Muchas gracias a los compañeros que pasaron por estos años, a veces comprendidos, a veces no, a veces como chivos emisarios. Porque los ministros son la caripela del gobierno y están para que les peguen; tienen que bailar siempre con la más fea”, culminó.