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Cancillería ya tiene proyecto de decreto para crear figura de embajador itinerante.

Desde hace varios años el actual ministro de Defensa, Luis Rosadilla, plantea la necesidad de que Uruguay cuente con representación diplomática o política en Haití. Esta semana, como medida provisoria, la cancillería uruguaya destinará a un funcionario para ese país con el objetivo de apoyar la entrega de la ayuda humanitaria enviada desde Uruguay luego del terremoto de enero. En paralelo, avanza la creación de la figura de un embajador itinerante como representante en los países en los que Uruguay integre misiones de paz.

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El ministro de Relaciones Exteriores, Luis Almagro, informó a la diaria que la cancillería estudia un proyecto de decreto que creará la figura del embajador itinerante para cuatro temáticas: misiones de paz, medio ambiente, derechos humanos y temas especiales. La iniciativa será presentada hoy por Almagro en la reunión del gabinete del ministerio, posterior a la del Consejo de Ministros.

El embajador itinerante será un funcionario especializado en un tema, que tendrá su base en Uruguay pero no un destino fijo. La idea es que, por ejemplo, quien sea elegido para dedicarse a medio ambiente participe en todas las cumbres y negociaciones vinculadas al cambio climático como representante uruguayo; el de derechos humanos asesore en los casos de eventuales violaciones a uruguayos residentes en distintas partes del mundo; y que el encargado diplomático de las misiones de paz sea el responsable por la coordinación de los contingentes en Haití, el Congo y en Oriente Medio.

Según señalaron fuentes del ministerio, las autoridades ya han realizado evaluaciones generales acerca de los perfiles que deberán tener los embajadores itinerantes, y se especula con que al menos los encargados de misiones de paz, de derechos humanos y medio ambiente no podrán ser funcionarios diplomáticos de carrera. Y si bien no trascendieron sus nombres, habría ya candidatos posibles para asumir una vez que se apruebe el proyecto de decreto.

En particular, el embajador itinerante de las misiones de paz deberá asumir responsabilidades atípicas en el campo diplomático, por las condiciones de vida que deberá enfrentar puntualmente en Haití. Almagro puntualizó que no necesariamente el funcionario designado esta semana para viajar a la isla caribeña será el futuro embajador itinerante en misiones de paz.

La base

La posibilidad de establecer un referente diplomático en Haití fue una propuesta del hoy ministro de Defensa, Luis Rosadilla, en 2007, y ahora resurgió como necesidad debido al terremoto que golpeó a ese país el 12 de enero. Según ratificaron fuentes de la cancillería, el gobierno de Brasil sugirió la apertura de una embajada o consulado uruguayo en Haití, entre otras cosas porque Uruguay es el país con el segundo contingente más numeroso (tiene más de 1.100 efectivos entre militares y civiles), y porque sólo los países que formen parte de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah) y que tengan representación diplomática podrán formar parte del Consejo Consultivo para la Reconstrucción de Haití, organismo que se formará en la órbita de las Naciones Unidas.

Este mismo tema estará hoy sobre la mesa en la comisión de Defensa del Senado, en donde recibirán al ministro Rosadilla. El senador Jorge Saravia, integrante de la comisión, considera que Haití “es un punto clave para América Latina, por lo que significa desde el punto de vista geopolítico y por la situación que vive”.

En vistas de que Uruguay participó de todo el proceso de paz, para el senador “sería bueno” que se estableciera una misión, “para tener presencia diplomática permanente” y para que el contingente militar “tenga el respaldo de un delegado de la diplomacia”.

Si bien el proyecto para la creación de los embajadores itinerantes recién se presentará mañana en el Ministerio de Relaciones Exteriores, Almagro anunció que se tomarán “medidas provisorias” para apoyar la entrega de donaciones uruguayas en Haití. El canciller dijo que en los próximos días se designará un funcionario diplomático que viajará esta misma semana a la isla, y que coordinará el arribo del buque ROU 04 General Artigas, que zarpó el 5 de marzo de Montevideo y que llegará el 6 de abril con donaciones: dos Unidades Potabilizadoras de Agua (UPA), medicamentos, alimentos, herramientas y juguetes.

Según un informe, conocido ayer, de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), sólo volver a la situación previa al terremoto le costará a Haití 7.800 millones de dólares, y la recuperación total 11.400 millones.

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