Miles de militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela manifestaron en las calles de Caracas su respaldo al presidente Hugo Chávez ayer, el día en que estaba previsto iniciar las celebraciones por el 5 de julio, cuando se conmemoran los 200 años de la independencia del país. Este aniversario pasó a un segundo plano y la atención estuvo centrada en el presidente, que se recupera de un cáncer en Cuba, según informó él mismo la noche del jueves.
“Ésta es una marcha que cambió de sentido, hoy este pueblo no vino sólo a recordar el discurso de Bolívar, sino que vino a ratificar su compromiso con el líder de esta era, que es Hugo Chávez”, dijo en uno de los actos el diputado Robert Serra. Un día antes, un acto de ascenso de generales y almirantes se convirtió en una ocasión de reafirmar la lealtad de las Fuerzas Armadas a Chávez y al “gobierno revolucionario”, como dijo el ministro de Defensa, Chárlos Mata. “Presidente Chávez [...] aquí están sus hijos, hijos de la revolución bolivariana”, decía ayer otro ministro, el del Interior, Tareck El Aissami, al participar de los actos públicos.
Los saludos a Chávez, afectuosos o formales, entre ellos los de varios presidentes latinoamericanos, comenzaron a llegar el viernes, después de que el gobernante hiciera su anuncio. Luego de pasar unos 20 días en Cuba, y mientras se tejían especulaciones de todo tipo sobre su salud, el presidente informó que fue operado de un tumor cancerígeno.
Chávez dijo que descuidó su salud y que quien se dio cuenta de que su salud necesitaba atención fue Fidel Castro, durante su visita a Cuba. “Me interrogó casi como un médico, me confesé casi como un paciente”, añadió. El presidente explicó que fue operado el 11 de junio y que una serie de estudios posteriores detectó células cancerígenas, lo que hizo necesaria una segunda cirugía. “Desde que el mismo Fidel Castro en persona […] vino a anunciarme la dura noticia del hallazgo cancerígeno, comencé a pedirle a mi señor Jesús, al Dios de mis padres, diría Simón Bolívar, al manto de la Virgen, diría mi madre Elena; [...] para que me concedieran la posibilidad de hablarles” a los venezolanos, dijo.
En línea con el sentir religioso de Chávez, también se organizaron ayer misas para rezar por su recuperación. Incluso obispos de Venezuela, que han sido muy críticos con el gobierno, dijeron a la prensa que “ahora sí” llamarán a rezar por el presidente, “ahora que se destapó la caja negra”, después de que se mantuviera en secreto la situación de Chávez.
Todavía no se puso fecha para el regreso del mandatario a su país. Ayer el canciller Nicolás Maduro pidió a la oposición que deje de hacer “propuestas necias”, como la de que el vicepresidente Elías Jaua asuma el cargo de Chávez mientras éste se recupera en Cuba.
La televisión estatal emitió un video en el que se ve a Chávez en La Habana junto a sus dos hijas y a Maduro. El mandatario, que solía marcar presencia, en especial los domingos con su programa Aló Presidente, saludó ayer desde su cuenta de Twitter: “Aquí estoy, haciendo mis ejercicios diarios y recibiendo ese baño de amor que me llega desde esa Gran Marcha de La Juventud. ¡Es la mejor medicina!”.