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Tres no es multitud

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Se escuchan en Brasil voces a favor y en contra de la unión civil de más de dos personas.

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Una polémica se desató en Brasil después de que en San Pablo se reconociera la unión civil entre tres personas, dos mujeres y un hombre que viven juntos desde hace tres años y quisieron registrar formalmente la relación.

La abogada y escribana Cláudia do Nascimento fue la que legalizó la “unión poliafectiva estable”, un documento que registra la voluntad de los tres de establecerse formalmente como familia y que contiene diversas cláusulas sobre pensión, reparto de bienes, planes de salud y separación. El documento funciona como una sociedad patrimonial entre tres personas, explicó el presidente de la Asociación de Abogados de Marília (municipio del estado de San Pablo), Tayon Berlanga.

Do Nascimento dijo a BBC Brasil que ya había detectado la existencia de un número relativamente importante de “familias poliafectivas” durante su investigación para su tesis de doctorado, que fue sobre este tema. “La idea de familia que teníamos antes no es lo único que podemos llamar familia hoy en día”, agregó, y aseguró que en su trabajo como escribana advierte cotidianamente “el aumento de diferentes composiciones familiares” y una tendencia de sus colegas a “adaptar el derecho a una realidad más plural que el casamiento tradicional”. La escribana explicó que “el modelo descrito por la ley [para la unión estable] es de dos personas”, pero que no se prohíbe que sea para más de dos.

Do Nascimento indicó que ahora corresponde a empresas y órganos públicos aceptar o no al trío como “unidad familiar” y consideró que, tarde o temprano, el tema llegará a la Justicia, que será la que tenga la última palabra. La presidenta de la Comisión de Derecho de Familia del Instituto de Abogados de San Pablo, la abogada Regina Tavares da Silva, consideró que es “un absurdo” el escrito de la escribana, que “va contra la moral y las costumbres brasileñas”. Para José Carlos de Oliveira, profesor de derecho y doctor de la Universidad Estatal Paulista, se trata de un documento que “contraría frontalmente la Constitución” y que será anulado por el Supremo Tribunal Federal. “Una familia está constituida por sólo dos personas, sean heterosexuales u homosexuales”.

Desde el gobierno no hubo ningún pronunciamiento, y, por su parte, la vicepresidenta del Instituto Brasileño de la Familia (civil), Maria Berenice Dias, dijo que se debe “respetar la naturaleza privada de las relaciones y aprender a vivir en esta sociedad plural reconociendo los diferentes deseos”.

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