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Una periodista espera por los resultados electorales, ayer, en la sede del movimiento Cinco Estrellas en Roma, Italia. / Foto: Massimo Percossi, Efe

Victoria compartida

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El Partido Democrático fue ayer el más votado en Italia aunque no tiene asegurado que pueda formar gobierno.

La victoria en las elecciones italianas fue para la centroizquierda de Pierluigi Bersani, pero los primeros resultados eran ayer muy ajustados e impedían conocer qué impacto tendría ese triunfo en la formación del Senado, que es definitoria para la elección de un primer ministro. La Cámara de Diputados sí quedaba en manos del Partido Democrático (PD) y se hablaba de la posibilidad de alianzas que, antes de los comicios, eran de lo más improbables.

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Con más de 50% de los votos escrutados, los datos sobre las elecciones de domingo y lunes auguraban largas jornadas de debate para la conformación de un nuevo gobierno. Las proyecciones de los votos a la Cámara de Diputados indican que la centroizquierda del PD obtenía 31,05% mientras que la derecha del Pueblo de la Libertad, de Silvio Berlusconi, lograba 27,59%, y quedaba segunda. En tercer lugar aparecía el Movimiento 5 Estrellas del cómico Beppe Grillo (25,62%), y en el cuarto puesto los grupos de centro que apoyaban al renunciante primer ministro Mario Monti (10,43%).

Así, la cámara baja quedaba en manos del PD, ya que la fuerza más votada tiene una representación bonificada en Diputados. Otra era la situación en el Senado, donde la representación de los partidos depende del voto que obtuvieron en las distintas regiones.

En esta cámara, las proyecciones -con 88% de los votos escrutados- favorecían a la alianza entre la Liga Norte y el Pueblo de la Libertad de Berlusconi en las regiones claves para el reparto de los escaños: Lombardía, Véneto, Campania y Sicilia. En todas ellas la alianza de la derecha superaba el 30% de los votos, y aventajaba por lejos al PD. Tanto en Lombardía como en Lacio y Molise se votaba también gobierno local, aunque de esa elección todavía no se conocían datos ayer.

Con los resultados parciales de ayer en la tarde se proyectaba que el Senado quedaría conformado por 123 escaños del Pueblo de la Libertad y la Liga Norte, 104 del PD, 57 del Movimiento 5 Estrellas y 17 de los grupos de centro asociados a Monti. Ante este panorama, una unión entre las fuerzas de Bersani y las de Monti -la que se señalaba como más probable antes de los comicios- no sería suficiente para neutralizar la victoria de las fuerzas de Berlusconi ni para alcanzar la mayoría: 158 escaños.

En lo incierto de este panorama la sorpresa la dio el cómico Beppe Grillo, no tanto por su votación, que se preveía que sería alta y que consolidaría al Movimiento 5 Estrellas como tercera fuerza, sino por el mensaje que a media tarde daba uno de los candidatos al legislativo: Grillo no quiere la ingobernabilidad y está preparado para apoyar a quienes estén dispuestos a negociar un programa común, informó la agencia de noticias Reuters. En el caso de una alianza entre Grillo y Bersani sí se superarían los 158 escaños y se impediría una mayoría de las fuerzas de Berlusconi. Por el contrario, si éstas quedaran en condiciones de formar un gobierno, ni siquiera se sabe a quién propondrían como primer ministro.

A primera vista parece menos probable una alianza entre Grillo y coalición de derecha, ya que esta última cuenta con todos los elementos que el movimiento que se declara antipolítico critica. Sin embargo, varios escenarios parecían ayer posibles. Incluso que Grillo descarte integrar acuerdos.

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