El gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) comenzarán una fase pública de conversaciones de paz en Ecuador el 27 de octubre. El anuncio lo hicieron los actuales jefes negociadores del gobierno y de la segunda guerrilla de Colombia, Mauricio Rodríguez y Pablo Beltrán, que leyeron un comunicado en la cancillería venezolana. Las partes acordaron, además, “iniciar el proceso de liberación de los secuestrados/retenidos con dos casos antes del 27 de octubre” y anunciaron que a partir de esa fecha realizarán “otras acciones y dinámicas humanitarias para crear un ambiente favorable para la paz”, sin aclarar cuáles serán.
En Venezuela se llevaron adelante las conversaciones previas al inicio de las negociaciones y fue en la frontera de ese país con Colombia que el ELN liberó, ayer, al tercero de tres arroceros que había secuestrado semanas antes en el departamento de Arauca. El Comité Internacional de la Cruz Roja, que recibió al liberado, informó que con este ya son tres los civiles que el ELN le entregó en los últimos 15 días. La liberación de los secuestrados y el fin de esta práctica era una de las condiciones impuestas por el gobierno para comenzar esta segunda fase de los diálogos después del acercamiento entre las partes, que comenzó hace ya tres años.
Se desconoce el número de rehenes que tiene el ELN, pero entre ellos está el ex diputado Odín Sánchez Montes de Oca, que en abril se canjeó a sí mismo por su hermano, Patrocinio, que fue alcalde y gobernador. Patrocinio fue condenado a 18 meses de prisión por corrupción en 2010 y un año después su hermano fue condenado a nueve años por su apoyo a un grupo de paramilitares.
El presidente Juan Manuel Santos dijo en una declaración pública que el avance de los diálogos con el ELN permitirá que la paz colombiana sea “completa” y, al igual que los jefes negociadores, agradeció a los países involucrados en el proceso: Venezuela, Ecuador, Noruega, Chile, Cuba y Brasil.
Santos dijo que las negociaciones comenzarán con la discusión en paralelo de los dos primeros puntos de la agenda que se dio a conocer en marzo. Uno de esos puntos es la participación ciudadana, que consiste en negociar de qué manera estará presente la sociedad en las conversaciones y cuál será la situación jurídica de distintos actores sociales que han sido condenados por sus vínculos con la guerrilla. El otro punto que se negociará en simultáneo son las acciones y gestos humanitarios que se deben generar para ayudar a construir la paz, que, entre otras cosas, hace referencia a la necesidad de que el ELN libere a todas las personas que tiene secuestradas.
El tercer punto de la agenda son las transformaciones para la paz, que contempla incorporar propuestas ciudadanas para solucionar problemas como la pobreza, la exclusión social y el daño medioambiental. Los últimos tres puntos de la agenda coinciden con la que trataron el gobierno y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC): víctimas, fin del conflicto armado e implementación de un eventual acuerdo.
El cambio de etapa estuvo acompañado por una renovación de los líderes en los grupos de negociadores. Por el lado del gobierno el jefe era Frank Pearl, que también era un representante plenipotenciario en las conversaciones con las FARC, pero ahora el encargado será Rodríguez y se ocupará exclusivamente de estas negociaciones. Por la guerrilla las conversaciones eran dirigidas por Antonio García y ahora quedará en su lugar Beltrán, que es integrante del Comando Central del grupo.
El comienzo de esta nueva etapa en las conversaciones con el ELN fue celebrado por distintos sectores en Colombia, que señalaron que también servirán para nutrir el proceso con las FARC.