Las presencias internacionales marcaron la etapa final de la campaña previa a la segunda vuelta en Chile, que enfrenta al oficialista Alejandro Guillier y al ex presidente opositor Sebastián Piñera.
En su cierre de campaña, Guillier contó con la presencia del ex presidente urugayo José Mujica, mientras que Piñera difundió mediante las redes sociales un video de apoyo enviado por el mandatario argentino, Mauricio Macri. En la grabación, el argentino les desea a los chilenos “la mejor elección” y luego agrega: “En eso no soy objetivo, porque hace muchos años que soy amigo de Sebastián, lo admiro y creo que es un gran dirigente”. Como Macri ocupa una posición de gobierno en Argentina, la cancillería chilena le pidió aclaraciones sobre el envío de este video. “Es altamente inusual que un presidente en ejercicio [...] apoye a uno de los candidatos diciendo que no puede ser ‘objetivo’ por la amistad que tiene con uno de ellos”, indicó el canciller chileno, Heraldo Muñoz.
La alianza de derecha Chile Vamos ha multiplicado sus esfuerzos en las últimas semanas para conseguir respaldos, después de que la primera vuelta, celebrada el 19 de noviembre, le diera una victoria menos holgada de lo que anunciaban las encuestas.
En esa instancia, Piñera obtuvo 36,6% de los votos y Guillier 22,7%. El candidato de ultraderecha José Antonio Kast, que reunió 7,9% de los votos, respaldó a Piñera. Por su parte, Carolina Goic, de Democracia Cristiana, y Marco Enríquez Ominami, del Partido Progresista, que lograron poco menos de 6% de los votos, apoyaron a Guillier. El candidato de Nueva Mayoría también obtuvo el respaldo de algunos dirigentes del Frente Amplio, que quedó tercero en noviembre con 20,3% de los votos, y de uno de los más de diez partidos que lo integran, la Izquierda Autónoma. Se espera que durante la jornada de hoy haya otras señales de dirigentes frenteamplistas hacia Guillier, a quien el Frente Amplio no respaldó abiertamente, aunque sí advirtió que una victoria de Piñera sería “un retroceso”.
De acuerdo con dos encuestas, los resultados de mañana serán muy ajustados, en torno a 40% o 45%, según los estudios de Cadem y Criteria, respectivamente. Los sondeos fueron criticados después de la primera vuelta porque sus previsiones no fueron acertadas y sus conclusiones fueron publicadas hace ya dos semanas, debido al veto de estas publicaciones de 15 días antes de las elecciones.
Los cierres de campaña estuvieron repletos de los eslóganes de ambos contendientes, que se presentan a sí mismos como los candidatos del “cambio” y aseguran que tienen los elementos para sacar a Chile del enlentecimiento económico en el que se encuentra.