Después de tres años de “contactos exploratorios”, el gobierno del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) comenzarán los diálogos de paz en Quito. La decisión se tomó horas después de que la guerrilla liberara al ex congresista Odín Sánchez Montes de Oca, que estuvo secuestrado durante diez meses.
El ELN liberó a Sánchez el jueves, varias semanas después de que Santos exigiera su libertad como condición para iniciar las negociaciones en la capital ecuatoriana. Esa acción allanó inmediatamente el terreno para que ambas partes instalen una mesa de diálogo alrededor de la cual se sentarán mañana mismo, en un intento del gobierno de lograr un acuerdo similar al alcanzado el año pasado con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
“El ex congresista ya está libre, y eso nos despeja el camino para iniciar esta otra negociación para tener una paz completa”, manifestó el presidente colombiano al intervenir en la XVI Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz que se celebraba en Bogotá. “¡Bienvenido, Odín Sánchez, a la libertad! Ya estamos listos para iniciar negociaciones con el ELN y trabajar para alcanzar la paz completa”, dijo por su parte el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, en su cuenta de Twitter.
Sánchez fue secuestrado por el ELN en abril, después de canjearse por su hermano Patrocinio, que estaba secuestrado hacía más de dos años y tenía problemas de salud. Los dos hermanos integraron el gobierno regional del departamento de Chocó -Patrocinio fue gobernador, Odín alcalde y luego diputado por esa localidad- y tienen en su historial denuncias de corrupción, según información del semanario colombiano Semana. Además, Odín fue condenado en 2009 a 108 meses de prisión por sus nexos con el ex jefe paramilitar Freddy Rendón. Aunque su liberación fue celebrada por muchos, otros en Chocó aprovecharon para recordar que el político debe los dos millones de dólares que le impuso la Corte Suprema de Colombia, en la sentencia que lo condenó a prisión, como reparación a las víctimas de los paramilitares a los que apoyaba.
El gobierno de Santos y el ELN informaron que la liberación de Sánchez se llegó mediante un acuerdo que incluyó el indulto de dos guerrilleros presos que también tuvo lugar el jueves. “Nuestros compañeros recuperan hoy su libertad en el marco del acuerdo humanitario bilateral, que también da la libertad al señor Odín Sánchez”, manifestó el grupo guerrillero en un comunicado. En las liberaciones del ex congresista y de los indultados, identificados como Nixon Cobos y Leivis Valero, participó una misión del Comité Internacional de la Cruz Roja. “Lo que viene ahora es instalar la mesa, y la mesa lo que necesita es participación de todos los colombianos y colombianas”, dijo en Twitter el jefe del equipo negociador del ELN en los diálogos de paz, Israel Ramírez, alias Pablo Beltrán.
Sin embargo, la versión de Sánchez contrasta con la oficial. En sus primeras declaraciones en libertad, el político puso en duda el carácter humanitario de su liberación al decir que se entregó dinero. “Yo tengo entendido que sí se pagó, pero no sé cuánto”, dijo a la prensa, antes de asegurar que el ELN “sigue secuestrando y extorsionando”. Su familia había hecho la misma denuncia unos meses atrás.
Por otro lado, el ex congresista dijo que ya inició acciones penales por el secuestro de su hermano y, aunque no aclaró si llevó dinero al ELN cuando se entregó en abril, sí aseguró que el secuestro fue “extorsivo”. Por último, Sánchez pidió la unidad de todos los colombianos para que obliguen a “los diablos del ELN” a iniciar los diálogos de paz y a que “entreguen a gente”.
La liberación del jueves no les pone punto final a los secuestros por parte del ELN, que mantiene retenido al soldado Fredy Moreno Mahecha desde el 24 de enero. El ministro de Defensa colombiano, Luis Carlos Villegas, exigió la semana pasada su libertad y dijo que confiaba en que fuera liberado a la par de Sánchez. Por el momento, no hubo novedades al respecto.
En tanto, Santos informó el viernes que ya le ofreció al líder opositor Álvaro Uribe que designe a un representante para que participe en las negociaciones que empiezan mañana. “Creo que hay puntos en la historia de los países y en las controversias políticas donde tenemos que ponernos de acuerdo y estar por encima de cualquier diferencia coyuntural o política”, dijo.