César Milani, que fue jefe del Ejército de Argentina durante el gobierno de Cristina Fernández, fue procesado ayer con prisión preventiva por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura cívico militar (1976-1983).
El juez federal de La Rioja, Daniel Herrera Piedrabuena, consideró que hay elementos suficientes para creer que Milani participó en el secuestro y la tortura de Pedro y Alfredo Olivera (padre e hijo) en 1977, algo con lo que el militar, que prestó servicios durante la dictadura, dijo que no tuvo relación. El ex jefe del Ejército fue procesado por el secuestro de Pedro Olivera como “autor directo de la privación ilegítima de la libertad y allanamiento ilegal” y por su “participación necesaria” en su tortura y la de su hijo, Alfredo, que fue detenido ilegalmente después que su padre. Además, Herrera procesó a Milani por “asociación ilícita con el represor Luiciano Benjamín Méndez”, que entonces era comandante del Ejército, para la desaparición de personas.
Además, el juez dispuso un embargo a Milani por un millón de pesos argentinos, más de 60.000 dólares. La defensa de Milani, Gustavo Feldman, anunció que apelará el procesamiento.