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João Doria, en San Pablo.

Foto: Rovena Rosa

En medio de choques entre la Policía y trabajadores, la Asamblea Legislativa de San Pablo aprobó reforma previsional

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Los empleados públicos de este estado brasileño pagarán más aportes y trabajarán más años para poder jubilarse.

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Con la votación favorable de 52 representantes y la oposición de 32, el gobierno estadual paulista que encabeza el gobernador João Doria, perteneciente al derechista Partido de la Social Democracia Brasileña, aprobó una profunda reforma de la previsión social, en medio de protestas de funcionarios públicos de este estado que llegaron hasta las inmediaciones de la Asamblea Legislativa de San Pablo.

Según informaron medios brasileños, fuerzas de choque de la Policía Militar paulista reaccionaron con violencia contra la manifestación que estaban llevando adelante los trabajadores, que intentaron seguir la votación desde dentro del recinto, cosa que no pudieron hacer. Las fuerzas represivas utilizaron balas de goma y gases pimienta para expulsar a los manifestantes, aunque los efectos de las sustancias irritantes llegaron hasta adentro de la Asamblea, causándoles malestar a algunos parlamentarios.

Miembros de la oposición denunciaron la situación en sus cuentas de Twitter, al tiempo que desde la dirección de prensa de la Asamblea Legislativa se informaba que una de las puertas del edificio había sido rota por las personas movilizadas.

En la misma línea se manifestó el gobernador Doria, que dijo que los funcionarios públicos fueron los que comenzaron a realizar acciones vandálicas, lo que generó la reacción policial. “No puedo dejar de manifestar mi repudio a los actos de vandalismo presenciados durante la votación, dentro y fuera de la Asamblea. Destrucción del patrimonio público, intimidación a los parlamentarios, agresión a policías y falta de respeto a la democracia”, afirmó Doria.

La propuesta de reforma previsional aprobada este martes prevé, entre otros puntos, el aumento de los descuentos que se les hace a los funcionarios públicos del estado de San Pablo, que pasarán de ser de 11% de su salario a 14%. Por otra parte, se aumentó la edad mínima de jubilación, que ahora pasó a ser de 62 años para las mujeres y 65 para los hombres. Con esta nueva legislación el gobierno paulista pretende ahorrar algo más de 7.000 millones de dólares en los próximos diez años.

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