El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que está de acuerdo con la afirmación de que su par ruso Vladimir Putin es un “asesino” y advirtió que el Kremlin “pagará las consecuencias” por presuntamente tratar de perjudicar su candidatura en las elecciones de 2020, según una entrevista difundida este miércoles por la cadena ABC, consignada por la agencia AFP.
Interrogado por el periodista que le pregunta si piensa que el presidente ruso “es un asesino”, Biden responde: “Sí, lo pienso”.
La declaración del mandatario estadounidense marcó un gran contraste con su predecesor, Donald Trump, quien siempre se mostró respetuoso con el mandatario ruso.
Los dichos de Biden se dieron a conocer un día después de que la inteligencia estadounidense presentara un informe en el que menciona “varios incidentes durante los cuales actores vinculados con los gobiernos ruso, chino o iraní atentaron contra la seguridad de las redes de organizaciones políticas, de candidatos o partidos” durante las elecciones realizadas en noviembre del año pasado, versión que fue desestimada por las autoridades rusas.
En la entrevista con la cadena ABC, Biden dijo que había hablado con Putin en enero después de asumir el cargo. “Tuvimos una larga charla, él y yo, lo conozco relativamente bien”, dijo Biden, quien habló personalmente en varias ocasiones con el presidente ruso en los años en que fue vicepresidente de Barack Obama, entre 2009 y 2017.
Además, Biden dijo que Rusia “pagará un precio” por las presuntas interferencias que se remontan también a las elecciones de 2016 en las que Trump le ganó a Hillary Clinton, y cuando le consultaron qué medidas tomará respondió: “Se verán en breve”.
Desde Rusia se reaccionó con dureza a los comentarios del presidente estadounidense.
“Biden insultó a los ciudadanos de nuestro país con su declaración”, escribió en su canal de Telegram el presidente de la cámara baja, Viacheslav Volodin, quien agregó que los ataques a Putin son “ataques a nuestro país”.
Mientras tanto, desde el Kremlin se rechazó el informe de la inteligencia estadounidense sobre la presunta interferencia electoral, al que el portavoz Dmitri Peskov calificó de “incorrecto e infundado”. “Rusia no se inmiscuyó de ninguna manera en los comicios mencionados en ese informe”, dijo el vocero del gobierno en una conferencia de prensa consignada por la agencia Sputnik. Peskov lamentó que tales materiales de dudosa calidad se utilicen como pretexto para imponer nuevas sanciones a su país.
“Esa política daña los lazos ruso-estadounidenses, que ya estaban en mal estado”, puntualizó el funcionario, quien dijo además que “esa línea no favorece a los esfuerzos ni a la manifestación de voluntad política para normalizar las relaciones”.