Ingresá

Olga D'arc Pimentel, de 72 años, recibe la vacuna Oxford-AstraZeneca, el 9 de febrero, en la comunidad de Nossa Senhora Livramento, estado de Amazonas, Brasil.

Foto: Michael Dantas, AFP

El gobierno de Bolsonaro decidió suspender el contrato de compra de la vacuna india Covaxin

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

La medida se adoptó en medio de sospechas de severas irregularidades en el acuerdo.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

El Ministerio de Salud decidió suspender la compra de la vacuna Covaxin, desarrollada por el laboratorio indio Bharat Biotech, en medio de las presiones que existían por presuntas irregularidades en los contratos firmados por el gobierno de Jair Bolsonaro con la empresa Precise Medicines, que actuó como intermediario en la millonario transacción. Este martes el ministro de Salud, Marcelo Queiroga, reveló a la cadena CNN Brasil la decisión de interrumpir el contrato. “Ya no es apropiado importar vacunas en este momento”, dijo lacónicamente el secretario de Estado.

Las denuncias señalan que el contrato entre el Ministerio de Salud y la empresa Necessidade, representante del agente inmunizante indio en Brasil, incluía una enorme sobrevaloración de la compra del producto. La vacuna fue la más cara entre todas las que compró Brasil desde el inicio de la pandemia.

Según se reveló en los últimos días, hay numerosos indicios de corrupción en este caso y el contrato por más de 323 millones de dólares es objeto de investigación por parte del Ministerio Público Federal (MPF). El presidente aprobó a principios de este año la compra de la vacuna india a un precio 1.000% superior al anunciado inicialmente por el fabricante. Un telegrama de la embajada de Brasil en Nueva Delhi muestra que, cuando se lanzó, la vacuna producida por el laboratorio indio Bharat Biotech costaba 100 rupias, o alrededor de 1,34 dólares la dosis. En febrero de ese año, bajo presión de Bolsonaro, la representante local Necessidade cerró la venta al Ministerio de Salud por el valor de 15 dólares la unidad. Al mismo tiempo, el gobierno federal rechazó comprar por 10 dólares la vacuna de Pfizer, argumentando que era demasiado cara.

Luego de conocida la noticia de que no se compraría la vacuna india, el vicepresidente de la comisión del Senado que investiga la gestión del gobierno de la pandemia, Randolfe Rodrigues, del partido ecologista Rede, utilizó sus redes sociales para comentar el hecho.

“Si no pasó nada, ¿por qué suspendieron la compra? ¡Esto sólo tiene un nombre!: ¡Confesión!”, escribió el legislador.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura