Ingresá

Pablo Mieres (archivo, marzo de 2023).

Foto: Ernesto Ryan

Ante reclamo de la FUS, Mieres reiteró que la obligación de las empresas de dar agua es sólo para trabajadores que “tienen ciertas afecciones”

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

La Federación Uruguaya de la Salud entiende que el suministro de agua potable debería ser responsabilidad de las empresas para todos los trabajadores de la salud.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Este miércoles, la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) expresó durante una conferencia de prensa que el Estado y las empresas privadas deberían asegurarles agua embotellada a todos los trabajadores de la salud. El pedido se hizo en el marco de la resolución del (Consejo Nacional de Salud y Seguridad del Trabajo (Conassat), que estableció “recomendar a los empleadores” brindar al menos un litro de agua embotellada por día a quienes formen parte de los grupos sensibles señalados por el Ministerio de Salud Pública (MSP) con relación al consumo de agua. Para dialogar al respecto, este viernes se reunieron el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, y una delegación de la FUS.

“Nuestra preocupación hoy es que los trabajadores de la salud privada, en su enorme mayoría en Montevideo y la zona metropolitana, no reciben agua potable para consumo personal en sus centros de trabajo”, reiteró Jorge Bermúdez, secretario general de la FUS, durante una rueda de prensa. A lo largo de su jornada laboral, los profesionales se ven obligados a consumir agua embotellada comprada por ellos o a tomar la que le otorgan sus centros de trabajo, que de momento es de OSE y “no es potable”, señaló Bermúdez.

El secretario general del FUS recordó que “lo que hace el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) es, entre otras cosas, llevar adelante lo que el Ministerio de Salud Pública decide”. En ese sentido, será clave la reunión que compartan ambos organismos, porque el MSP “establece los valores y juzga la calidad del agua”, consideró.

Días atrás, la ministra de Salud Pública, Karina Rando, expresó en una rueda de prensa que su ministerio no cuenta con un “número exacto” para saber cuándo el agua que brinda OSE no será más potable, pero manifestó que a partir de la información que vaya surgiendo, el MSP verá “qué se puede hacer”.

Por su parte, tras la reunión, Mieres respondió que “la obligación de los empleadores de suministrar agua a sus trabajadores está establecida en relación a las personas que tienen ciertas afecciones” como hipertensión y problemas renales, o están embarazadas. A la vez, se refirió a la integración del Conassat, pues dijo que uno de sus integrantes, “el PIT CNT, al que pertenece la FUS, acordó y firmó está resolución”.

“El alcance, por ahora, es este”, expresó el ministro. Si bien “estas cosas son dinámicas” y “hay que estar permanentemente monitoreando”, el ministro resaltó que lo que prima es la definición del MSP “que establece este alcance”.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura