A menos de una semana de que el proyecto de ley del presupuesto quinquenal aprobado por los diputados ingrese a la cámara alta para su estudio y votación, los senadores Javier García y Pedro Bordaberry, del Partido Nacional (PN) y el Partido Colorado (PC), respectivamente, se refirieron, con distintas perspectivas, al artículo sobre el levantamiento del secreto bancario que el Frente Amplio (FA) quiere volver a poner sobre la mesa.
Este martes, los senadores junto a su colega frenteamplista Eduardo Brenta participaron en un desayuno de trabajo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing del Uruguay, que tuvo como tema principal la “situación de Uruguay en la actual coyuntura”. En ese marco, y con una discusión presupuestal de por medio, García aseguró que “si el Poder Ejecutivo insiste con eso [el secreto bancario] en el Senado, dará muestras de una falta de actitud institucional y de no valorar la actitud del Partido Nacional”. “No dejamos al país sin presupuesto, esperemos que el mismo gobierno con sus actitudes no lo provoque”, acotó.
Concretamente, este lunes, el senador frenteamplista Sebastián Sabini, quien presidirá la Comisión de Presupuestos integrada con Hacienda, se refirió a la importancia de “cumplir con ciertos cánones internacionales en materia de transparencia”, para lo que sería necesario rever el artículo sobre el levantamiento del secreto bancario a pedido de la Dirección General Impositiva (DGI)”.
Por su parte, Bordaberry, al final de su intervención en la actividad, consideró que Uruguay “tiene la garantía del levantamiento con intervención de un juez y la notificación del interesado”. Esta modificación planteada por el Poder Ejecutivo responde a una recomendación realizada en 2020 por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE); en ese sentido, Bordaberry dijo que dicho organismo “no nos pide que no sea un juez el que lo levante, no nos pide que no se notifique, sino que dice que no se notifique antes y que los plazos sean más cortos”. Bordaberry dijo que cree que se puede “trabajar en eso” con el objetivo de “seguir asegurando la seguridad jurídica”.
Bordaberry expresó la necesidad de “tener un shock inmigratorio”
García hizo un recorrido por lo que fueron los cinco años de gobierno de la Coalición Republicana y criticó la “falta de rumbo” de la administración que asumió en marzo de este año; Bordaberry hizo un repaso de los últimos 20 años y planteó que se aumentó el gasto en áreas como educación, salud y seguridad, pero que aun así no ha habido mejoras; Brenta se refirió al contexto internacional, los desafíos que enfrenta Uruguay y las políticas en las que trabaja el oficialismo.
Volviendo al presupuesto, Bordaberry adelantó que los senadores colorados propondrán “normas de eficiencia” y “medición”, bajo la órbita del Tribunal de Cuentas, para “medir y evaluar los resultados de las políticas públicas” y para que así se “puedan corregir cuando no están logrando los resultados”.
Destacó la necesidad de “poner el foco en lograr resultados que generen impacto en la gente”. “Uruguay gasta, pero tiene que mejorar, y si tengo menos alumnos que atender no tengo por qué pedir más presupuesto”, dijo, en referencia a la baja natalidad, y agregó que si se pide, es necesario tener “mejores resultados y menos abandono”.
El senador apuntó que lo que le falta al presupuesto, y por ende lo propondrán en la cámara alta, es “desarrollar la atracción de talentos y tener un shock inmigratorio”. “Hay otro problema a largo plazo que tiene Uruguay, que no lo vamos a ver ahora, pero va a pasar dentro de diez años, y es que cada vez somos menos, y cada vez somos más viejos”, resaltó.
“De vuelta vamos a estar hablando de la reforma jubilatoria, y eso y lo otro, porque es lo que nos va a pasar”, aseguró. Es por eso que reiteró la propuesta de un “shock inmigratorio” así como también “de mejora de la residencia”.
En la línea de controlar el gasto, García afirmó que el presupuesto “contiene la creación de más burocracia”, pero que “no existe una sola referencia o herramienta que promueva un seguimiento y trazabilidad para que el gasto público sea eficiente y orientado al contribuyente”.
Es por eso que planteó la necesidad de “incorporar herramientas para fortalecer el seguimiento del gasto público y su eficiencia”, ya que “es plata de la gente y no del Estado”. En ese marco, hizo tres propuestas “para hacer desde ya, si se quiere”.
La primera es “fortalecer las facultades del Tribunal de Cuentas”, la segunda es que se haga un informe sobre la evolución de la gestión de los programas y de la gestión presupuestaria a través de la Agencia de Monitoreo y Evaluación de Políticas Públicas, creada por la ley de urgente consideración, y la tercera es la incorporación de nuevas tecnologías, big data, inteligencia artificial para el control del gasto.
Brenta, quien es parte del oficialismo, aseveró que Uruguay “necesita un proyecto con base en el crecimiento con distribución y participación con una estrategia fundada en la competencia, atención y cooperación con un Estado fuerte, con empresas privadas innovadoras y la participación social desarrollada, que tenga en cuenta la nueva tecnología de democratización”.
A su vez, destacó la necesidad de una vinculación con los partidos políticos “fuertes”, así como “una importante presencia del Estado en los territorios con el objetivo de promover a través de estas políticas la necesaria consistencia entre el desarrollo económico y la cohesión social”.