En un intento de que la gente minimice su circulación por hospitales y policlínicas, la Asociación Uruguaya de Oftalmología (Asuo) decidió hace dos semanas abrir un centro de llamadas para atender de forma gratuita consultas de personas de cualquier prestador de salud. Hasta ahora se han resuelto o derivado más de 400 consultas, indicó a la diaria el presidente de Asuo, Martín Sánchez. El oftalmólogo detalló que trabajan 20 profesionales por día y que del total de consultas, 70% fue resuelto en el momento, mientras que el otro 30% debió ser derivado a la emergencia.
Sánchez explicó que las consultas son muy variadas pero se podrían dividir en tres grandes grupos: “Un grupo es todo lo que se relaciona a la refracción, es decir, los lentes. Otro tiene que ver con cuadros de ardor, irritación, secreción o picazón en los ojos. El tercero serían las consultas sobre estudios paraclínicos que fueron indicados antes de esto, y las personas solicitan una evaluación de los resultados”.
El desarrollo de la consulta varía según el tema que motivó la llamada. Por ejemplo, comentó Sánchez, “en la mayoría de las consultas por estudios paraclínicos es posible enviar por Whatsapp una foto de los resultados y se le puede contestar”. Otras consultas refieren a cosas puntuales que acaban de pasarle al paciente; Sánchez contó un caso que atendió recientemente: “Una persona estaba trabajando y le entró hipoclorito de sodio diluido en el ojo. Llamó, preocupada, le dimos las instrucciones que debía seguir y pudo evitar la consulta en la puerta de emergencia”. En otros casos no hay otra alternativa más que la derivación; Sánchez mencionó la consulta de una paciente que en la consulta telefónica evaluaron como grave, por lo que la enviaron a consultar de inmediato, resultó en un corrimiento de retina y pudo ser operada a tiempo.
Entre los datos relevados en estas primeras llamadas Sánchez destacó que 70% son personas mayores de 50 años, 27% son de prestadores públicos y 79% son de Montevideo.
Asimismo, subrayó que las consultas son siempre a las personas, “no a los usuarios de un prestador; esto quiere decir que no tenemos acceso a la historia clínica. Esto es diferente del trabajo que hacemos en las instituciones, donde llamamos a la gente que ya tenía hora con el oftalmólogo”, en esos casos sí cada especialista tiene acceso a la historia clínica, porque es su médico tratante”. La intención, aclaró el oftalmólogo, es “asesorar en cuanto a lo que pueda estar pasando con el paciente, para determinar si amerita que vaya a consultar a la emergencia o si se puede diferir y esperar, y así la gente se pueda quedar en su casa”.
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