La Comisión de Expertos en Seguridad Social (CESS) se reunió este viernes por la tarde para votar el Informe de Recomendaciones para la Reforma del Sistema Previsional que el gobierno planea implementar.
Tal como se esperaba, el documento final fue aprobado por el oficialismo y los representantes empresariales. Por otro lado, los representantes del Frente Amplio (FA), el PIT-CNT y la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay se opusieron. La votación final fue de diez votos a favor y cinco en contra.
Álvaro Forteza, integrante de la CESS por el Partido Independiente, señaló a la diaria que se trabajó en un “buen clima” y que hubo aportes técnicos “de calidad” para que finalmente se aprueben las recomendaciones que serán elevadas al Poder Ejecutivo y evaluará si sirven esas recomendaciones para enviar al Parlamento un proyecto de ley. “Evidentemente, no hay una relación común del informe, por algo algunos lo respaldamos y otros no”, valoró.
Por su parte, la delegada de las cámaras empresariales en la CESS, Elvira Domínguez, dijo a la diaria que votaron a favor porque entendieron que “es imprescindible procesar una reforma de la seguridad social integral”, pero que solicitaron plazo hasta el martes que viene para agregar los fundamentos del voto porque “las cámaras en algunos puntos tienen diferendos y tienen alguna recomendación conjunta que quieren dejar plasmada”.
Sobre el trabajo de la comisión aseguró que se trabajó con “absoluta cordialidad”. “Independientemente de las posiciones filosóficas encontradas, cada uno hizo su aporte. Todos los que participaron hasta el último momento estuvieron realizando un esfuerzo para mejorar el informe. Hubo un clima de respeto, cooperación, transparencia y rigor técnico”, aseguró Domínguez.
Con relación al documento, contó que “se trata de una reforma integral que pretende que en algún momento todos los ciudadanos reciban prestaciones pasivas en función de su esfuerzo”.
“Se va a garantizar un ingreso mínimo para los mayores de 71 años, va a haber un foco complementario para aquellos que estén en el primer pilar, si quieren podrán complementar su ahorro. Hay ajustes para actualizar las pensiones de sobrevivencia en el entendido de que no es lo mismo la situación que tenían cuando se redactó la ley original, cuando la mujer no accedía al mundo del trabajo; hoy mujer y hombre trabajan. De alguna manera se procura igualar los sexos, el hombre tiene un acceso limitado a la pensión de sobrevivencia”, aseguró la representante de los empresarios.
Ahora, el gobierno comenzará a elaborar el documento, pero puede tardar, informaron a la diaria. De todos modos, la idea es que esté pronto para el primer trimestre del 2022. Según informó la CESS, el Informe de Recomendaciones será presentado “en los próximos días” a la presidencia de la Asamblea General y a la Prosecretaría de Presidencia.
En contra
En sus fundamentos para oponerse al informe, a los que accedió la diaria, el FA señaló que en una primera instancia la CESS trabajó con los 15 miembros pero a partir de julio, a la hora de empezar a redactar el informe, “se notó un enlentecimiento de los ritmos de trabajo de la comisión”, así como un “cese de las reuniones de los ocho grupos de trabajo”, algo que concluyó con un anuncio a principios de agosto, cuando se comunicó que sólo nueve de los 15 integrantes de la comisión trabajarán en el borrador de recomendaciones. “Entre julio y el 5 de octubre (fecha en que fue distribuido el citado borrador), nuestra delegación fue excluida del proceso de trabajo”, señalaron.
En este sentido, el FA consideró que para el 5 de octubre “se recibió un documento con propuestas de reforma elaborado a puertas cerradas por los nueve representantes de la coalición de gobierno, a lo largo de más de tres meses. Documento cuyos pilares de construcción eligen alternativas que habían sido objetadas por nuestros delegados en los grupos de trabajo, y que adicionalmente se basa en estudios y estimaciones de las opciones elegidas por aquellos que confeccionaron el documento”.
Según el partido de la oposición, las reformas planteadas en el informe “requieren de grandes procesos de diálogo y consenso para asegurar tanto su sustentabilidad social y financiera, como su estabilidad en el tiempo”.
“Esta decisión del oficialismo sin duda se apartó del espíritu con el que fuimos convocados a trabajar a la comisión, desvirtuó el objeto de la CESS y rompió unilateralmente un ámbito de trabajo que, como se señaló, había funcionado de manera adecuada hasta ese momento”, señala la fundamentación del voto del FA.
Al mismo tiempo, consideraron “llamativo” que “luego de ser trabajado durante tres meses en forma exclusiva por los nueve miembros que representan a los partidos políticos que integran la coalición de gobierno y al propio Poder Ejecutivo”, se diga que “el documento no representa necesariamente la posición de los partidos políticos que integran la coalición de gobierno, ni la del Poder Ejecutivo”.
De acuerdo con el FA, el oficialismo “se aseguró la mayoría exigida por la ley (nueve miembros) para aprobar lo que no obtuviere consenso, si expresamente se invoca que este documento no los representa”.
El análisis de la delegación frenteamplista considera que varias recomendaciones “de importancia sustancial” fueron incluidas en el borrador sin “cuantificación de impactos sociales o económico-financieros, y/o análisis de viabilidad con evaluación de opciones”. Por ejemplo, se menciona la recomendación para “habilitar el cúmulo de jubilación y actividad laboral, así como el retiro parcial”, algo que “no sólo no se encuentra cuantificado, sino que no se avanza sobre cuál sería el diseño a implementar y cuantificar”.
Las “cuestiones sustanciales”
La delegación del FA señaló que se opone a varios aspectos denominados “cuestiones sustanciales” que se encuentran en el informe de recomendaciones de la CESS.
Entre estos aspectos se encuentra el aumento de la edad mínima para jubilarse y el cambio de 25 a 30 años de aportes, lo que puede provocar una “caída de la cobertura en relación a la situación actual”, según estimaciones realizadas por técnicos del Banco de Previsión Social, lo que además puede impactar de forma mayor en “trabajadores y trabajadoras con historias laborales fragmentadas y más vulnerables”.
También hubo críticas al planteo de aumentar la edad mínima de jubilación a 65 años porque, según señala el FA, es una recomendación que “amenaza dejar un contingente importante de trabajadores sin atender a edades donde no tendrían posibilidades de reinsertarse en el mercado de trabajo, lo que podría incluso agravar los problemas financieros”. En este sentido, también se critica que las recomendaciones no evaluaron medidas para estimular el retraso de la jubilación.
Por la negativa
El PIT-CNT, por su parte, fundamentó su voto negativo al informe de recomendaciones al considerar que busca “reducir el gasto en seguridad social” y para ello utiliza como mecanismos “recortar prestaciones, beneficios y derechos de los trabajadores una vez que se acerquen a la etapa de retiro”.
La fundamentación de la central sindical, a la que tuvo acceso la diaria, señala que “buena parte de las recomendaciones se dirigen a concentrar el ajuste sobre los trabajadores” y que esto se hace “a través del aumento en la edad de retiro al barrer, la reducción de las jubilaciones, la disminución de la tasa de reemplazo de las jubilaciones por imposibilidad física y la extensión de años de aportes para el cálculo del sueldo básico jubilatorio”.
El PIT-CNT consideró que las propuestas están “fuertemente alineadas con los planteos realizados por las AFAP privadas” y que estas promueven una “profundización y ampliación del fracasado esquema de capitalización individual”. “El objetivo central es dar más protagonismo a las empresas privadas con su consiguiente lucro, en detrimento de la responsabilidad del Estado”, denunció el PIT-CNT, y explicó que esto se hace mediante la obligatoriedad o el establecimiento por defecto del aporte a las AFAP.
“A lo largo de este proceso se ha planteado reiteradamente la necesidad de un nuevo pacto social en seguridad social. Creemos que excluir cierto tipo de discusiones y centrar el ajuste sobre los trabajadores, como se desprende de estas recomendaciones, es un muy mal camino para convocar a ese nuevo pacto”, sostuvo la central sindical.