El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) definió días atrás que ante la constatación de irregularidades “sustantivas” en los protocolos sanitarios de empresas, se proceda a su cierre preventivo. El ministro Pablo Mieres dijo que “se tomó un paso más para apretar las clavijas”, debido a que el nivel de incumplimiento de las empresas inspeccionadas está próximo a 50% desde noviembre.
Según detalló el jerarca en diálogo con la diaria, tras esta decisión siete empresas fueron cerradas de forma preventiva la semana pasada —tal como informó Subrayado— y habrá “alguna [clausura] más” por estas horas.
“Algunas se levantaron horas después, cuando la empresa cumple con corregir el protocolo, sin perjuicio de que se sigue el procedimiento sancionatorio”, explicó. Mieres remarcó que “la medida de la clausura preventiva lo que busca es cuidar la salud, y por tanto tiene el afán de que se corrijan lo antes posible” las irregularidades. “Se busca que la empresa reaccione y resuelva aquello en lo que está en falta”, agregó.
El ministro señaló que los principales incumplimientos que llevan al cierre preventivo son tres: “No uso de tapabocas, no distanciamiento y no presencia de instrumentos de higiene en el local de trabajo”. También se han constatado otras irregularidades de tipo “formal”, de menor gravedad, como no disponer de protocolo por escrito o no contar con cartelería que indique los pasos a seguir para cumplir con las normas sanitarias.
¿Cómo procedían antes de esta decisión del MTSS los inspectores? Mieres explicó que frente a las irregularidades “no necesariamente” se cerraba el lugar de trabajo, sino que “dependía de si había una situación de afectación evidente o no”. “Por eso definimos un criterio para que no quedara en la apreciación de los inspectores”, explicó.
Al menos la mitad de las empresas tienen incumplimientos
En noviembre del año pasado el gobierno lanzó el operativo “Trabajo responsable”, que incluyó la fiscalización con unos 100 inspectores de empresas y comercios de todo el país para vigilar el cumplimiento de las normas sanitarias. “Es imprescindible mandar señales claras desde el punto de vista de la responsabilidad de empleadores y trabajadores, y es crucial que los comportamientos se alineen con protocolos establecidos desde marzo”, dijo en esa oportunidad el titular del MTSS.
Tiempo después, la Inspección General de Trabajo informó que en el primer mes del operativo se constataron irregularidades en más de la mitad de las empresas. Según el detalle, hubo incumplimientos en 56% de los lugares inspeccionados la primera semana, en 50% la segunda y la tercera semanas, y en 63% la cuarta semana.
Consultado sobre si se mantienen estos niveles, Mieres indicó que hay “una continuidad de los números” y por eso se tomó la decisión de “impulsar la medida de que si no se cumple hay clausura preventiva”. Añadió que los incumplimientos no están en un sector de actividad en particular, sino que se dan “de forma muy aleatoria, en lugares de trabajo de muy diverso tipo”. También detalló que la Inspección General de Trabajo concurre a empresas tanto “por salidas de oficio, que son aleatorias, porque se va recorriendo distintos lugares”, como por “denuncias” de irregularidades por parte de los trabajadores.
Sobre el cuerpo de inspectores, Mieres expresó que se mantiene el número y no se incorporó personal “porque es una función muy profesional, a la que se ingresa por concurso, y no es como cuando tenés una actividad administrativa que podés trasladar funcionarios a cumplir esa tarea” frente a una mayor demanda de trabajo.