Sólo con los votos del oficialismo, la Cámara de Senadores aprobó este martes el proyecto que crea una sección de archivo público con material de la última dictadura cívico-militar dentro del Archivo General de la Nación. Ahora la iniciativa pasará a ser estudiada por la cámara baja y en la oposición esperan que el tratamiento sea distinto, en el sentido de que se cite a las organizaciones sociales y a la academia para que opinen sobre el proyecto de ley, una de las principales quejas que expresó el Frente Amplio (FA) en la sesión.

“Esperemos que se encuentre un consenso lógico, cosa que no pasó acá”, apuntó el senador frenteamplista Óscar Andrade. El FA también propuso un aditivo para que se protejan los datos personales “con claridad”, pero el oficialismo no lo aceptó. El senador frenteamplista José Carlos Mahía apuntó que no acompañaron el proyecto precisamente porque los sustitutivos no fueron acompañados por el oficialismo, e hizo mención a “las especulaciones” que se dieron tanto en el Parlamento como entre actores del gobierno, por ejemplo, por parte del ministro de Defensa Nacional, Javier García, que acusó a la oposición de tener “nerviosismo” frente a la liberación de los archivos.

Para Mahía, que no se haya llegado a un consenso “genera una situación inconveniente”. El FA, además, intentó esta mañana que el proyecto volviera a comisión, pero no tuvo éxito. En una rueda de prensa, la senadora frenteamplista Sandra Lazo recordó que cuando se recibió “de primera mano” la información sobre el proyecto en la comisión donde sesionaban conjuntamente Derechos Humanos, Equidad y Género y Educación y Cultura no hubo “tiempo de procesarla y, por otra parte, faltó un componente fundamental para nosotros: escuchar lo que las organizaciones de derechos humanos –por ejemplo, Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos y Crysol– puedan decir de este proyecto”.

En ese marco, Lazo recordó que la fuerza política se tuvo que reunir con esas organizaciones por fuera del ámbito parlamentario para conocer sus opiniones: “Nos importa que lo digan en el marco de la discusión parlamentaria, y eso no sucedió”.

Al inicio de la discusión del proyecto, el miembro informante, el senador nacionalista Jorge Gandini, expresó que el gobierno tenía intenciones de que el proyecto se aprobara “rápidamente”. En ese marco, señaló que la “base” del proyecto es la “libertad”: “La libertad como principio del acceso tiene la limitante de las reservas del entorno privado”.

Gandini aclaró que estos archivos no son la “versión” de la historia reciente, sino que se acumulan “documentos materiales que tienen que ver con ese tiempo, pero la historia no se construye sólo con esos documentos. No estamos haciendo pública la verdad, sino documentos que hasta ahora quedaron reservados”.

Por otra parte, Gandini apuntó que “es verdad” que la comisión “no recibió” a decenas de organizaciones que “pudo haber recibido”, pero “también es verdad que fue suficiente porque es un tema largamente discutido”, señaló, y agregó que “lleva el mismo espíritu que la ley que no se está aplicado y tiene muchos años de vigencia”, con referencia a la Ley 18.435, del Archivo de la Memoria. Fue así que el legislador blanco propuso un aditivo para derogar esa ley.

Por su parte, el senador cabildante Guillermo Domenech apuntó que aceptan el proyecto porque “el pueblo tiene derecho a saber”. “No podemos tratar al soberano como a una persona discapacitada” a la que “no se le puede permitir acceder a cierta información. Pone al alcance de todos información documental, su veracidad o no dependerá del juicio de cada uno que acceda a la misma”, reflexionó.

Silvia Nane, senadora del FA, coincidió con Domenech en que “el pueblo quiere saber”, pero, de acuerdo a la legisladora, “tienen que hablar los que saben la verdad, porque hasta el momento cada pedacito de verdad que se conoce es porque aparece bajo tierra”. “Hay otro montón de archivos de patitas callados, que andan dando vuelta por ahí, en parte amparados por el poder político. Lo que queda es seguir marchando los 20 de mayo. Será seguir dando vuelta la tierra, porque mientras la tierra siga hablando no hay ninguna página para dar vuelta”, expresó.

Mientras tanto, el senador blanco Carlos Camy valoró que desde hace “más de 20 años” todos los gobiernos se “preocuparon” por “conocer más” sobre el pasado reciente, pero apuntó que no alcanza, por lo que “se debe ir a más”. En ese sentido, expuso que “no todo dato es información, pero no toda información es inteligencia”, y agregó que el proyecto de ley otorga garantías a la “administración, administrados, investigadores y a todos los ciudadanos”.

En tanto, en una larga exposición y clara defensa de su gestión, el senador suplente y exministro de Defensa José Bayardi nuevamente reconoció la labor de la Comisión para la Paz creada en el gobierno de Jorge Batlle, pero afirmó que “nadie ha hecho más para una política de archivo que el FA” en sus tres períodos de gobierno. En ese marco, citó la creación del sistema de archivos, la aprobación del acceso a la información pública y el propio Archivo Nacional de la Memoria, entre otras disposiciones.