prueba con armado

Editar

EL ESTUDIO fue presentado por Esteban Perroni y Daniel González Arias, ambos del Observatorio de Medios del Claeh. Como antecedente figura el trabajo realizado por el Claeh en 1987, cuyo autor es Luciano Álvarez y que fue publicado en 1988 con el título Los héroes de las siete y media. Perroni explicó que se estudiaron noticieros centrales de televisión abierta (Telenoche, TNU Noticias, Subrayado y Telemundo) de enero a diciembre de 2008. “Básicamente se trabajó como quien le hace una encuesta al informativo”, consignó. Las noticias objetivo fueron aquellas referidas a la temática de la seguridad ciudadana. Perroni detalló que se observó un total de 1.212 informativos y 4.710 noticias objetivo. Respecto de dónde se ubica la noticia de seguridad ciudadana, dijo que 42% está en los titulares, 8% es la primera noticia del día y el resto se encuentra en otra sección del noticiero. En promedio, de cada diez noticias objetivo, cinco se ubicaron en los titulares y casi una se ubicó como la primera noticia del día. En una estructura de cuatro bloques, tres de cada cuatro noticias sobre seguridad ciudadana se presentaron en el primero. La categoría hombre adulto es la que más aparece vinculada al victimario. En seis de cada diez noticias (60%) se cita como fuente oficial a la Policía y le siguen en orden el Poder Judicial y, con porcentajes menores, fuentes legislativas, entre otras. Siete de cada diez noticias que no citan fuentes oficiales mencionan a personas relacionadas con la víctima y en menor grado con el victimario. El 33% de las noticias observadas fueron emitidas por noticieros de Canal 4, 32% se pasaron en Canal 12, 28% en Canal 10 y 6% en Canal 5, todo lo cual significa un peso promedio de 20%. Vale decir que el 20% del tiempo de noticias que emite un noticiero corresponde al tema de la seguridad ciudadana. Canal 4 ranquea alto en la cantidad de noticias objetivo dadas como la primera del día (42%). Le siguen Canal 12 (30%), Canal 10 (28%) y Canal 5 (15%). La temática principal se reparte entre droga, violencia, inseguridad, accidentes y corrupción. Dentro de cada canal lo más frecuente es: inseguridad en Canal 4, violencia en Canal 5 y Canal 10, inseguridad en Canal 12. “Inseguridad” puede incluir una miscelánea de noticias. En cuanto a la territorialización de la noticia vinculada a la seguridad ciudadana, la mayor parte se ubica en la zona noroeste de la ciudad y no se contextualiza el hecho en relación con la pobreza, según el estudio del Claeh. En conclusión, la noticia tipo sobre seguridad ciudadana presenta las siguientes características: “Omite las menciones de situaciones de pobreza, no hace referencia a los antecedentes de los victimarios, no cita fuentes estadísticas, los victimarios son hombres adultos, las fuentes predominantes son la Policía, las fuentes no oficiales son personas cercanas a la víctima, o ella misma. La mayor cantidad de delitos ocurre en el noroeste de la ciudad de Montevideo. El tema dominante es la violencia o la inseguridad”, dijo Perroni. Si yo les dijera... El estudio fue comentado por el sociólogo Rafael Paternain, director del Observatorio de Violencia y Criminalidad del Ministerio del Interior, y por la periodista María Urruzola, directora de Información y Comunicación del Ministerio de Desarrollo Social (Mides). “Recurrente, dificilísimo de abordar racionalmente entre los distintos actores participantes, y, sin duda, de primera trascendencia desde el punto de vista de la legitimidad democrática”. Así calificó Paternain el tema en cuestión. “Quien divorcie estos asuntos o estos debates de los problemas de fondo de la legitimidad democrática en Uruguay se equivoca o pierde una buena parte del problema en perspectiva”, dijo. Agregó que los medios de comunicación son una parte estructural del problema de la inseguridad. “Si yo les dijera a ustedes que las noticias policiales (y uso deliberadamente esta expresión) ocupan un lugar importantísimo en los noticieros; si yo les dijera que además tienen un lugar de destaque (acá se mencionaban los titulares y los primeros bloques); si yo les dijera que las noticias policiales hablan de violencia, de criminalidad y de inseguridad; si yo les dijera que la fuente predominante a partir de la cual se construye la noticia es una fuente policial y que el principal canal de fuente no oficial es la propia víctima; si yo les dijera que los victimarios son menores y jóvenes, y además hombres, en su aplastante mayoría; si yo les dijera que el espacio social privilegiado son aquellos barrios socioeconómicamente más vulnerables y más carenciados de la ciudad; si yo les dijera que Canal 4 es el más proactivo en estos temas y el 5 el menos proactivo... Si yo, en realidad, les dijera todo esto, les estaría diciendo cosas que ustedes ya saben. Que todos los que están aquí, sin excepción, saben”, enfatizó Paternain. “Y yo creo que ésas son las principales conclusiones de este estudio. No creo que haya demasiadas más”, sentenció. Para Paternain, esta confrontación entre lo que podemos saber a partir de un entrenamiento cotidiano y lo que puede reflejar un abordaje de corte cuantitativo amerita por lo menos dos órdenes de reflexión. En primer lugar, Paternain expresó su preocupación ante la clasificación de la noticia como de “seguridad ciudadana” y el hecho de que el estudio no haya definido ese concepto ni las variables que lo componen. Dijo además que el ámbito de la emisión es diferente del de la producción de la noticia y apuntó que no hay que confundir el estudio de la emisión con el de los efectos, que es otro continente de asuntos. “El análisis de emisión no nos da como resultado inmediato un análisis eminente de los efectos”, determinó, y agregó que sería bueno tener algún parámetro (como la cantidad de noticias políticas o deportivas que emiten los noticieros) con el que comparar los datos. El director del Observatorio mencionó que los victimarios son hombres y que, en consecuencia, hay que poner el acento en este punto porque es un punto de análisis de género. “También en el mundo de la violencia y la criminalidad los victimarios son hombres”, puntualizó, y agregó que la mirada victimológica no debe quedar ausente en un estudio de emisión de medios. El sociólogo hizo referencia al debate en torno a si los informativos son totalmente intencionales o si, en realidad, son sujetos pasivos que reflejan una realidad que los trasciende y se someten a las demandas y gustos de la gente. “Pero hay tres o cuatro cosas que dejan en falsa escuadra a los medios de comunicación: 20% de apelaciones en las noticias al tema de las reincidencias o delincuentes reincidentes. No tenemos manera de probarlo, pero yo les digo, sólo de memoria, que en el año 2005 y 2006 ese porcentaje debe de haber sido mayor que el que tenemos hoy y, en ese contexto, se debatía la Ley de Humanización del Sistema Penitenciario. ¿Cambió tanto la reincidencia como para que hoy se hable tan poco?”. Finalmente, mencionó el modo en que la noticia fluye desde las fuentes policiales hasta los canales y consideró que habría que hacer una correlación sobre si las noticias georreferenciadas, más que obedecer un patrón de clasificación de clase social, no obedecen a que hay seccionales que dan más información que otras. Pacto de sentido Por su parte, Urruzola tituló su ponencia “Los villanos de las 20 horas”, parafraseando el título del libro de Álvarez. Urruzola propuso realizar un ejercicio: qué pasaría si al prender “la misa cotidiana de los laicos” aparece una placa que diga “por razones ajenas a nuestra voluntad nada nuevo ha sucedido en las últimas 24 horas...”. “Pensaríamos que el canal se volvió loco, porque los ciudadanos tenemos un pacto de sentido con los noticieros. El pacto es que habrá un equipo de profesionales que se encargará de ordenar el caos que significa la vida -lo real- y a las 20.00 nos mostrarán lo más importante de la jornada, tanto de nuestro país como del mundo”, explicó la periodista. “Después de 300 años de prensa, 110 años de cine, 100 años de radio, casi 70 de televisión y 60 años de noticieros, los ciudadanos del mundo hoy somos completamente mediáticos y comprendemos, sin necesidad de hacerlo explícito, el pacto de formato que nos proponen los medios al realizar su construcción de lo real”, dijo, y agregó que a las 20.00 unas 300.000 personas por día en Montevideo miran lo más importante del día. Antes de preguntarse quién decide lo más importante del día, Urruzola repasó el modo en que la tecnología imprimió nuevos ritmos y modalidades a los informativos, modificó el transcurrir de las noticias e instaló la falacia de que las imágenes no mienten. Urruzola invitó a preguntarse qué significa que la noticia sobre inseguridad ciudadana esté siempre entre los titulares y que sea muda con respecto al contexto socioeconómico, entre otras cosas. Agregó que cuando la Policía interviene hay una apariencia de delito, por lo que las noticias deberían ser judiciales y no policiales. Y concluyó que está en vías de extinción el trabajo periodístico cuando lo que lo motiva no es el afán de entender y sólo queda el relato de un hecho aislado que nada nos cuenta.