-¿Es esperable que siga bajando el desempleo o estamos frente a un "mínimo estructural"?
-Preferimos no hablar de desempleo estructural porque históricamente en Uruguay esta tasa se ubicaba en el torno del 8% y la realidad ha demostrado que evidentemente no lo estaba. Por eso, en principio no renunciamos a continuar este proceso de descenso, aunque siendo cocientes de que estamos enfrentando el núcleo más duro de desempleo. Precisamente acaban de afiliarse formalmente a la empresa Cutcsa 16 trabajadoras mujeres, que ingresaron durante 18 meses con el programa Objetivo Empleo dirigido para desocupados de larga duración. Estas trabajadoras -hasta hace poco consideradas personas de muy difícil incorporación al mercado laboral- , hoy están integradas con un trabajo absolutamente digno con niveles salariales del orden de los 18.000 pesos. Eso es una demostración de que es posible continuar en este proceso, (aunque) siendo conscientes de que cada vez es más difícil.
-Ante el nuevo escenario ¿cuáles son las preocupaciones en materia de empleo para 2012?
-El primero objetivo a corto plazo es la posibilidad de incorporar cerca de 250.000 mujeres inactivas que en Uruguay trabajan en forma no remunerada cuidando niños, adultos mayores y personas con discapacidad. La idea es que a través del Sistema Nacional de Cuidado se puedan mejorar las condiciones de trabajo de las mujeres, fundamentalmente el régimen de maternidad y la generación de una licencia por lactancia. Partimos de la base de que ya casi no hay áreas de la actividad económica donde la mujer no participe. El ejemplo más duro es el de la construcción, donde ya hay mujeres trabajando.
-¿Se piensa en fomentar el regreso de uruguayos del exterior?
-Sí. Una propuesta es recuperar el capital social que Uruguay tiene fuera del país, los uruguayos en el exterior. En este sentido, nuestro foco está puesto fundamentalmente en los países que presentan serias dificultades en materia de empleo, claro caso de Europa, particularmente España, donde hay una colectividad importante. En ese sentido, se pretende generar un buen mecanismo de intermediación laboral, hacer conocer la oferta, ofrecer políticas de capacitación a los uruguayos que regresan y colaborar en la intermediación laboral para insertarlos en el mercado de trabajo, si es posible antes de que regresen. Desde el 1º de enero funciona una unidad especial en el Ministerio de Trabajo para atender específicamente la demanda laboral de los uruguayos en el exterior. Además, en marzo va a estar operativa una página web denominada Vía Trabajo, donde va a estar disponible toda la oferta de trabajo pública y privada que esté dispuesta a ofrecerse. Igualmente datos empíricos que tenemos hasta el momento, proporcionados por el Ministerio de Relaciones Exteriores, indican que la gran mayoría de los uruguayos que retorna se incorpora rápidamente al mercado de trabajo.
-¿Y traer extranjeros?
-No descartamos la posibilidad de que en algunos sectores de alta calificación se recurra a lo que se denomina una política de migración. La posibilidad de traer a Uruguay personas muy calificadas, tomando como ejemplo lo que fue el Instituto Pasteur. Esta es una idea, lo único concreto sobre esto es que en el Consejo de Ministros, el Presidente propuso agilizar todos los trámites de personas que pretendan radicarse en Uruguay ya que todavía siguen teniendo complejidad, vamos a hacer propuestas concretas para reducir las complejidades y los costos.
-El sector empresarial elevó una propuesta para reincorporar jubilados al mercado laboral por la falta de mano de obra ¿En que quedó esa propuesta?
-Se está tratando de instrumentar un mecanismo que permita a los jubilados incorporarse a ejercer tareas docentes, capacitando jóvenes egresados de los programas del INEFOP, con pasantías laborales y al mismo tiempo capacitando a los propios trabajadores que ya están en la obra extendiéndolo a otras ramas de la actividad. Eso está prácticamente acordado en el Diálogo Nacional por la Seguridad Social entre todos los actores políticos, empresarios, trabajadores y el Gobierno, y es un proyecto de ley que probablemente ingrese al parlamento a mediados de febrero.
-¿Cómo se dinamiza la oferta laboral en el sector agropecuario ante el auge de la construcción que se lleva trabajadores del campo?
-Un elemento clave son los salarios y las condiciones de trabajo. Si el sector agropecuario pretende retener, y esto ha sido explícito entre los propios empresarios, sus trabajadores más calificados, no hay otra alternativa que generar niveles salariales más altos, mejores condiciones de trabajo y más capacitación para mejorar la productividad de los sectores. Por ejemplo, hoy en la zona de Colonia el proyecto Montes del Plata está generando un problema en la producción lechera de la región porque muchos trabajadores ante los salarios que ofrece esta empresa optan por trabajar en la construcción aún con baja calificación.
-Respecto a la formalización del trabajo ¿cuáles son los planes de acción?
-No sólo hay que tener una fuerte política inspectiva, cosa que estamos haciendo en coordinación con el BPS, la DGI y la Dirección de Aduanas, sino también que hay que ir creando mecanismos que se adapten a la realidad de cada uno de los sectores. Por ejemplo en el deporte se han encontrado formas para que futbolistas, basquetbolistas, ciclistas, aporten a la seguridad social generando una herramienta que se adapte a sus necesidades. Nuestro foco este año va a estar puesto en los trabajadores autónomos porque creemos que es allí donde hay una informalidad aún muy importante. Ya se incorporaron a la negociación colectiva los trabajadores de la cultura. Artistas, músicos, bailarines, etc., que hasta hace poco tiempo eran considerados otra cosa, no trabajadores, y por lo tanto, carecían absolutamente cobertura de seguridad social. Además de los sectores que tradicionalmente presentan niveles de informalismo importante, como la construcción y el trabajo doméstico.
-¿Es posible que la crisis económica europea incida en los niveles de empleo en el transcurso de 2012?
-Primero no descartamos ni creemos que el país esté blindado ante la crisis, lo que sí creemos es que tiene impactos que probablemente estén focalizados en áreas de la actividad productiva cuyo destino sean los países europeos fundamentalmente y quizás Estados Unidos. Ya está pasando en algún sector, como en la madera. Lo que pensamos y trabajamos en el marco del Gabinete Productivo, son políticas anticíclicas que permitan sostener estos sectores durante la crisis de forma tal que no se pierdan las empresas pero sobre todo la mano de obra calificada de ese sector porque después no se repone más. Como base vamos a implementar el paquete de medidas que se utilizó en 2008 y 2009, probablemente con algunas mejoras en términos de herramientas económicas que nos sean útiles en ese sentido.
-Por ejemplo...
-Algunas medidas ya existen: la modificación del régimen de seguro de desempleo, que genera un mecanismo de rotación que otorga niveles de desempleo decrecientes a partir del 80%, antes no se podía combinar el seguro de desempleo como lo establece la ley con la capacitación a través del INEFOP. Esto hace que el período de cesantía sea utilizado para mejorar las capacidades del trabajador. Hay políticas también que ayudaron en su momento a mejorar el régimen jubilatorio y flexibilizar el acceso a la jubilación lo que permite redimir situaciones y al mismo en 2008 se aprobó una ley que otorgó a las mujeres un año de cómputo jubilatorio por cada hijo, hasta cinco.