Según una encuesta divulgada recientemente por Equipos Mori, 64% de la población está a favor de bajar la edad de imputabilidad penal hasta los 16 años en el plebiscito que se realizará junto a las próximas elecciones nacionales, mientras que 31% se expresó en contra y 5% no sabe o no contesta. La consulta es una iniciativa del Partido Colorado, acompañado por el sector Todos Hacia Adelante, del Partido Nacional, quienes impulsaron la recolección de firmas.
Según dijo a la diaria Fabiana Goyeneche, vocera de la Comisión Nacional No a la Baja -integrada por el Servicio de Paz y Justicia, El Tejano, Proderechos, Ielsur, Gurises Unidos, El Abrojo y la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay, entre otras organizaciones-, los datos no sorprendieron. “Están dentro de lo que esperábamos. A lo largo de 2013 no fue mucho lo que se hizo en cuanto a campaña para revertir esta cifra. Hicimos mucho trabajo interno de organización y redactamos el nuevo documento base que vamos a lanzar dentro de pocas semanas. No tomamos el resultado de la encuesta como una falta de aliento, es una motivación para seguir trabajando. Confiamos en que se revierta la situación de este plebiscito. Hay algunos números que sí nos alertan que es la alta aprobación de la baja por parte de gente joven y es uno de los principales lugares a los que queremos apuntar”, señaló.
Para Goyeneche, muchas de las personas que se manifestaron a favor de la baja no lo hicieron porque están a favor de la propuesta concreta sino en contra de la situación en general. “Nos preocupa que las personas con tal de hacer algo diferente acepten eso, ya que si se les muestran otros proyectos tal vez no sea tanto el apoyo a bajar la edad de imputabilidad. A eso apuntamos”, sostuvo.
Según explicó la vocera de la Comisión Nacional No a la Baja, el objetivo de la campaña a partir de ahora será poner énfasis en que “los resultados concretos con esta reforma van a empeorar la situación que a la gente le preocupa”. Si bien “no tenemos definidas actividades en concreto, vamos a realizar difusión en los medios y actividades de taller, debates abiertos al público para contrastar ideas y brindar información en general, ya que sigue habiendo desconocimiento del tema por parte de la gente”.
También pretenden articular con los partidos políticos que se manifiestan en contra de la baja. “Si bien nuestro objetivo es hacer una campaña propia, es importante que quienes están en contra de la baja expliquen sus motivos y ofrezcan propuestas alternativas”, dijo. Por su parte, el presidente del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), Javier Salsamendi, dijo a la diaria que “el directorio tiene una posición muy definida en contra de la baja de la edad de imputabilidad por razones elementales, que es que no ha dado resultado en ningún lugar del mundo. Aplicar el derecho penal de adultos a personas que tienen menos años que las personas a las que se les aplica hoy, claramente no sólo no resuelve el tema sino que traslada hacia adelante la eventual necesidad de seguir bajando la edad frente a hechos que pudieran aisladamente ocurrir”, y preguntó: “¿Dónde se pone el límite?”.
A su entender los objetivos fundamentales del proyecto a plebiscitar ya están cubiertos. “No tiene sentido que se realice una reforma de la Constitución para buscar objetivos que en realidad o están cumplidos o efectivamente están encaminados por la legislación vigente. Salvo que el objetivo que se persiga no sea el manifiesto y que haya algún tipo de objetivo de carácter electoral, que no creo, la verdad que cuesta entender cuál sería la razón para llevar adelante una propuesta de este tenor”.
Consultado sobre el respaldo ciudadano que tiene la propuesta a plebiscitar, Salsamendi opinó que “desde hace muchísimos años en Uruguay ha habido una construcción simbólica, que no se compadece con los números y las realidades, donde el adolescente ha pasado a ser el enemigo potencial, ha habido una construcción de un enemigo. Y no es que no haya problemas en materia de seguridad y de comisión de delitos eventualmente por parte de adolescentes, pero distan mucho de ser los que más los cometen en primer lugar y en segundo lugar es increíblemente exagerado ponerlos como si fueran el principal problema de seguridad pública. Pero quienes han impulsado eso, consciente o inconscientemente, han tenido un éxito enorme en su campaña”.