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Sin divisional, pero internacional

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La increíble historia del Brasília Futebol Clube, un equipo casi amateur que llegó a la Copa Sudamericana.

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El martes no fue un día más para el Brasília Futebol Clube. Por primera vez jugó un partido de copa internacional, la Sudamericana. Fue empate 0-0 con Goiás, equipo de la Primera División de Brasil. El encuentro se desarolló en el estadio Bezerrão, reducto del principal adversario del Brasília, el Gama. Los colorados, así les dicen, no pudieron jugar en su cancha, el Mane Garrincha, debido a que la Conmebol no la habilitó. Brasília también hizo historia en ser el primer club del Distrito Federal de Brasil en participar en una competencia internacional.

Repasando su nacimiento, nos encontramos con una institución de tan sólo 40 años y con pocos títulos. Desde su creación, el 2 de junio de 1975, ha ganado ocho Torneos Brasilienses y una Copa Verde, que fue la que lo clasificó a la Sudamericana. También participó en ocho ediciones de la serie A del torneo brasileño, dos de la serie B, una de la serie C y tres de la serie D. La época del natalicio de Brasília coincide con el comienzo de la profesionalización del fútbol en la capital de Brasil.

Actualmente no forma parte de ninguna de las divisionales del Campeonato Brasileño. Para hacerlo en la serie D de 2015 (última divisional) debería haber ganado el Campeonato Brasiliense, que es el torneo estadual del Distrito Federal de Brasil. Éste se desarrolla anualmente y da un cupo para la serie D al equipo que lo gane. Esta temporada Brasília no tuvo esa suerte, ya que perdió las finales con Gama. Los colorados no juegan el Campeonato Brasileño desde 2013, cuando disputaron la Serie D. En esa ocasión terminó en la posición 35 entre 40 equipos.

La pregunta que surge entonces es: ¿cómo un club que no juega en ninguna divisional del fútbol brasileño está compitiendo en la Copa Sudamericana? La respuesta tiene el nombre de Copa Verde, una competición que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) creó en 2014, que disputan 16 clubes clubes del norte y centro oeste de Brasil. El torneo comienza en octavos de final y se juega en partidos de ida y vuelta hasta llegar a un campeón. La CBF decidió darle como premio al ganador de esta competencia la clasificación a la Sudamericana, y así fue que los colorados consiguieron esa vacante tan preciada. La final fue ante Paysandú de Belén y se definió con un emocionante 7-6 en los penales, tras resultados de 2-1 favorables a cada equipo en los juegos de ida y vuelta. En 2015 se volvió a realizar la Copa Verde y el equipo vencedor fue Cuiabá de Mato Grosso del Sur. Este equipo milita en la serie C del Campeonato Brasileño y ya se aseguró jugar la Copa Sudamericana 2016. Es como que en Uruguay un año se clasifique Wanderers de Artigas y al otro Alto Perú, una cosa así.

Brasília perdió muchos jugadores desde que fue campeón de la Copa Verde, a mediados de 2014. Al no haberse clasificado para jugar la serie D, las competiciones oficiales de los colorados fueron hasta principios de mayo, cuando finalizó el torneo estadual. Antes del juego del martes ante Goiás, el último partido oficial había sido el 2 de mayo, cuando cayó en la final del Brasiliense ante Gama. Esta inactividad hizo que muchos de sus jugadores salieran a buscar otros horizontes. El mayor referente del actual plantel de los colorados es su capitán, Pedro Ayub, que está en la institución desde 2014. El volante de 38 años ya pasó por clubes como Grêmio, Portuguesa y Avaí, entre otros.

Esta noche, el increíble Brasília buscará seguir haciendo historia cuando visite a Goiás en el estadio Serra Dourada de Goiânia. Dado que no recibió tantos como local, cualquier empate con goles lo clasificará. Así que ojo al piojo. No sea cosa que el equipo sin divisional dé el batacazo en esta Copa Sudamericana.

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