Ingresá

José Mujica reconoce que fue “excesivamente temerario” de su parte haberse colocado frente a un micrófono

Menos de 1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

“No hay que hacerlo. Una cosa es decir lo que uno piensa, pero otra cosa muy diferente es ser un suicida”, declaró el ex presidente.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

“No hay que ponerse delante de las tanquetas [...] Si usted sale a la calle se expone”, fue la respuesta de José Mujica a una consulta de un periodista sobre el incidente registrado el martes en Venezuela cuando una tanqueta del Ejército arremetió contra un grupo de manifestantes opositores al gobierno. Tras recibir varias críticas por sus dichos, el líder emepepista aclaró que no estaba justificando la actitud de los militares. “No tengo tiempo para andar defendiendo a los milicos venezolanos. Con defender a los milicos uruguayos ya tengo trabajo de sobra”, declaró al semanario Búsqueda. Mujica reconoció además haberle “errado como a las peras” con sus declaraciones iniciales. “Fue excesivamente temerario de mi parte haberme puesto frente a un micrófono. No hay que hacerlo. Una cosa es decir lo que uno piensa, pero otra cosa muy diferente es ser un suicida”.

El ex mandatario no descartó, de todas maneras, volver a hacer declaraciones a la prensa, y explicó que lo que buscaba era “concientizar a los más jóvenes acerca de que detrás de un micrófono puede haber un loco o un desaforado que, después de registrarla, reproduzca la declaración en los medios masivos de comunicación”. “Yo lo que quiero es que los gurises sean conscientes de eso y que no se regalen, caracho, que no se expongan a las salvajadas que hacen los medios, que cuando uno dice un disparate, lo reproducen como si nada. Eso es tener mala leche”, sostuvo.

Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura