Ingresá

Autoridades comunales pretenden que la plaza Zabala no tenga que ajustarse a los estereotipos de belleza dominantes

Menos de 1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

Los encargados de la planificación urbana capitalina criticaron la “frivolidad” de los vecinos y dijeron que quieren una plaza “que se sienta hermosa por dentro, no por fuera”

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

La instalación de una franja de piso de goma de un color verde intenso en la plaza Zabala generó un nuevo cruce entre la Intendencia de Montevideo (IM) y un grupo de vecinos de Ciudad Vieja. A raíz de las quejas, la comuna decidió dar marcha atrás y remover el nuevo piso. Las autoridades aseguraron que están dispuestas a escuchar las opiniones de los vecinos, pero siempre y cuando “no se pretenda que la plaza Zabala se ajuste a los estereotipos de belleza dominantes, que buscan imponer una visión única acerca de cómo deben verse la cosas”. Un jerarca del Departamento de Acondicionamiento Urbano de la IM consideró que “sería muy perjudicial que las revistas sobre diseño de espacios públicos nos digan cómo se tienen que ver nuestras plazas. Lo único que lograríamos si cedemos a esta presión sería crearle sentimientos de frustración y problemas de autoestima a la plaza Zabala, que, al no poder alcanzar los estándares establecidos por la frivolidad dominante, se sentiría menos que otras plazas”.

Las autoridades rechazaron los calificativos de los vecinos hacia los nuevos bancos y el piso de goma. “Dicen que son ‘feos’, que son ‘horribles’, pero yo me pregunto: ¿quién define qué es bello y qué no? ¿La sociedad de la imagen y del consumo? ¿Los medios omnipresentes? Además, nosotros queremos una plaza que se sienta hermosa por dentro, no por fuera. La frivolidad de algunos vecinos no puede imponer sus criterios”, declaró el jerarca consultado.

Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura