Ingresá

¿Qué opina de la temporada turística?

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago
Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Luz (transportista de caudales y raudales): “Parecía que no iba a venir ni un argentino, y al final vinieron más que el año pasado. Es la prueba de que los porteños son completamente impredecibles y de que tenemos que buscar otras alternativas que nos den más certezas, como, por ejemplo, apostar el turismo de Haití. Porque capaz que los haitianos no tienen mucho poder adquisitivo, pero por lo menos sabemos que van a seguir así por lo menos 50 años más. Certezas, necesitamos certezas”.

Gianina (periodiva deportista): “Es terrible, porque como la temporada fue mejor de lo que se esperaba los porteños empezaron a incendiar bosques para sabotearnos. Son lo peor. Yo pienso que teniéndolos al lado a ellos no hay manera de prosperar. No hay que dejarlos entrar y a otra cosa. Aparte, se acabarían los problemas con las colas en los pasos de frontera. Entraría mucho menos gente, pero cuando quiera entrar algún millonario, va a pasar como si nada. Hay que apostar al turismo de alta gama”.

Romualdo (tocador de jabón): “Uruguay está carísimo, los servicios son horribles, el agua está helada y la gente tiene una mala onda terrible todo el tiempo. Brasil, en cambio, está re barato, tiene tremendos servicios, las playas son alucinantes y la gente es bárbara. Pero increíblemente hay decenas de miles de brasileños que igual vienen a veranear acá. Esa gente realmente odia a su país. No me extraña que hayan elegido a [Jair] Bolsonaro de presidente. Son masoquistas por naturaleza”.

Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura