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Alumnos de sexto año de la escuela China, trabajando con Microorganismos Eficientes Nativos (MEN). (archivo, julio de 2017)

Foto: Andrés Cuenca

Nueva edición del concurso Educación Solidaria

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Pueden participar integrantes de la enseñanza formal y no formal.

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El Ministerio de Educación y Cultura (MEC) lanzó la quinta edición del concurso Educación Solidaria, que busca reconocer a aquellos equipos tanto de la educación formal como no formal que se dediquen a proyectos con impacto en sus comunidades. Desde hace años el ministerio busca recompensar a las instituciones que logren combinar los contenidos curriculares de todos los niveles con “actividades solidarias en beneficio de la comunidad”. El certamen está organizado en conjunto con la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), el Centro Latinoamericano de Aprendizaje y Servicio Solidario (CLAYSS) y el centro de formación y cultura rural El Chajá.

Según los organizadores, la verdadera calidad educativa significa no sólo transmitir los contenidos académicos, sino también trabajar en la formación de los estudiantes “para una participación democrática comprometida, que incida en la mejora de los aprendizajes y en el clima educativo”, como indican las bases del concurso. Asimismo, buscan reconocer “las experiencias educativas solidarias que permiten a las y los estudiantes ampliar su horizonte de aprendizaje y comprometerse en la transformación de su comunidad junto con otros actores sociales” y de esta forma “fortalecer y difundir una cultura participativa, solidaria y de compromiso ciudadano”.

Más allá de reconocer el trabajo logrado por cada equipo, la idea del concurso es ayudarlos a potenciar esa experiencia. Con ese fin, los premios incluyen apoyo económico y asesoramiento de especialistas relacionados con cada área de trabajo.

Los proyectos ganadores de 2017 pudieron avanzar y concretar sus experiencias. Uno de los premiados fue el equipo Entrebichitos, de la escuela 319 de Casavalle, que trabaja con microorganismos eficientes desde 2015, beneficiando al medio que los rodea, ya que sirven para limpiar los pozos negros, los corrales y, al mismo tiempo, fertilizar los cultivos. Para lograr su proyecto actual recibieron apoyo tanto del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable como de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación.

En la presentación que se llevó a cabo el lunes estuvieron presentes los escolares para exponer sobre su proyecto, así como los adolescentes del Instituto de Enseñanza de la Construcción, que detallaron su trabajo sobre la autogestión, también premiado el año pasado, por el que terminaron la obra en la cooperativa de vivienda 8 de Marzo, integrada por mujeres.

La convocatoria a la quinta edición del concurso está abierta hasta el 7 de setiembre. Para leer las bases y obtener más información se puede visitar las páginas de CLAYSS y del MEC.

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