Hoy comienza a definirse el segundo torneo en importancia que tiene Conmebol: Junior de Colombia y Atlético Paranaense de Brasil jugarán la primera final de la Copa Sudamericana. Al igual que en la Copa Libertadores, esta será la última edición que se dispute con finales de ida y vuelta. Desde 2019 se jugará un único partido en campo neutral; el año próximo será en el estadio Nacional de Lima.
A las 21.45, hora uruguaya, el estadio Metropolitano Roberto Meléndez tendrá cerca de 32 grados y 75% de humedad, aspecto favorable para los colombianos, que recibirán la primera final en Barranquilla. La revancha será el miércoles 12 en el Arena da Baixada, en Curitiba. En esta instancia los goles de visitante no inciden para definir el campeón; en caso de haber empate en el resultado global se jugarán dos suplementarios de 15 minutos, y de persistir la igualdad se definirá por penales. El partido será arbitrado por la terna peruana comandada por Diego Haro y tendrá a Darío Ubriaco como observador VAR.
El equipo que salga campeón jugará la Recopa Sudamericana 2019 con Boca Juniors o River Plate –que jugarán la final de la Libertadores el domingo en Madrid– y la Suruga Bank con Shonan Bellmare (campeón de la Copa J League), y se clasificará de forma directa a la fase de grupos de la Libertadores del año que viene.
Junior de Barranquilla llegó a la final luego de superar a Independiente Santa Fe de Bogotá en un global de 3-0. Antes, eliminó a los argentinos Lanús, Colón y Defensa y Justicia. Los tiburones, dirigidos por nuestro compatriota Julio Avelino Comesaña (con Sebastián Viera como capitán en el arco) van por levantar su primera copa internacional. Comesaña no contará con Teófilo Gutiérrez ni con Gabriel Fuentes, expulsados en el partido anterior. Se espera que el uruguayo Viera, que no estuvo en la semifinal por una lesión en su rodilla, pueda volver al arco.
Atlético Paranaense, que también buscará levantar su primer trofeo internacional, llegó a esta instancia tras eliminar a Fluminense (el global fue de 4-0). Antes, eliminó a Newell’s Old Boys, Peñarol, Caracas y Bahía. El huracán es dirigido por el joven Tiago Nunes y cuenta, entre sus principales figuras, con el argentino Lucho González.