Deporte Ingresá
Deporte

Entrenamiento del equipo de fútbol powerchair de Deportivo Montevideo. Al centro, Lucía Barboza. (archivo, octubre de 2018)

Foto: Ricardo Antúnez

Se jugó en Uruguay la Copa Powerchair Libertadores

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

Deportivo Montevideo se consagró en Las Piedras.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

“Estuvo fantástica, es una experiencia única”, le contó Lucía Barboza a Garra luego de ganar con Deportivo Montevideo la Copa Powerchair Libertadores que se jugó en el Polideportivo de Las Piedras el fin de semana. Lucía, la chiquilina montevideana de 14 años que hace un camino diario de seis kilómetros en silla de ruedas para ir al liceo, tal como lo contó en la diaria hace un par de semanas, integra un equipo uruguayo de fútbol en silla de ruedas a motor (además, es parte de la selección). Jugó este fin de semana junto a Fabián Medina, Brian Medina, Marco Díaz, Leonardo Fernández y Ángelo Lara. Deportivo Montevideo le ganó a Huracán de Carrasco, luego venció a Río de Janeiro y perdió ante Titanes de Córdoba. Ya en semifinales derrotó a Máquinas Guerreras de Rosario y en la final enfrentó a Tigres de Pacheco, al que le ganó 2-1 para coronarse campeón, reeditando la final de 2017. “El partido más bravo, por así decirlo, fue contra Tigres de Pacheco”, cuenta Lucía, que también recuerda aquella final del año pasado: “Había sido muy pareja, tal es así que nos habían ganado con un gol de oro”.

El cuerpo técnico de Deportivo Montevideo está compuesto por el entrenador Santiago Camejo, el ayudante de campo Bruno Díaz, la psicóloga deportiva María Eugenia Berneche y el mecánico en sillas Martín Medina. “Seguimos entrenando hasta fines de diciembre, los sábados en la Plaza de Deportes 7, y paramos en enero”, cuenta Lucía, que juega al fútbol en silla de ruedas desde que tiene nueve años.

También es un juego

El powerchair football –o fútbol en silla motorizada– es un deporte en equipos conformados por cuatro integrantes cada uno (tres jugadores de cancha y un golero) que se practica con la utilización de sillas de ruedas eléctricas equipadas con una barrera metálica especial –que está adelante de las piernas– con la que mueven la pelota e intentan convertir goles, claro. Los partidos se juegan en un gimnasio o en una cancha de básquetbol.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

¿Te interesa el deporte?
Suscribite y recibí en tu email la newsletter de deporte.
Suscribite
¿Te interesa el deporte?
Recibí la newsletter de deporte en tu email todos los domingos.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura