El Der Klassiker, uno de los clásicos del fútbol alemán, fue para el Bayern Münich. Los bávaros vencieron 1-0 a Borussia Dortmund a domicilio y quedaron más líderes que nunca, sacándole a su rival de hoy 7 puntos en la tabla. Un año más, el octavo consecutivo, la Bundesliga parece ser cosa del Münich.
Joshua Kimmich, cuando terminaba el primer tiempo, puso el gol de la victoria. Fue una joya de alta calidad: el volante tomó la pelota al borde del área tras un rebote y le pegó por arriba, mitad tiro directo y mitad picada, que se coló por encima del arquero Roman Bürki, que sólo alcanzó a tocarla.
Antes y después del único gol del partido, el juego fue muy dinámico. Los dos equipos plantearon un fútbol directo, con mucha verticalidad, un trato de pelota ágil y llegando con muchos hombres al área rival. Los arqueros fueron los culpables de que no se dieran más goles. Sí, los goleadores Robert Lewandowski y Erling Haaland estuvieron en la cancha, contaron con varias chances claras de convertir, pero los goleros intervinieron siempre.
Con la victoria, Bayern le sacó una buena distancia a su rival: 7 puntos de 18 posibles. Y es más: si Leipzig gana mañana quedará segundo, por encima de Dortmund.
Hay quienes ya festejan.