En Catar se está disputando la XVII Copa Mundial de Clubes de la FIFA, ese torneo que sustituyó a la vieja Copa Intercontinental y ahora se juega entre los campeones de cada continente más un invitado local. Por más que estemos en 2021, esta edición del mundial corresponde al 2020, el año de la pandemia. El tardío campeonato se está jugando en febrero porque la Copa Libertadores de América recién pudo terminar hace exactamente una semana.
Lo cierto es que la pelota ya rodó por los estadio de Rayán y el domingo será día decisivo para saber quiénes se meten en la final. No es muy atractivo, pero a las 12.00 de nuestro relojes jugarán por el quinto puesto el Ulsan Hyundai, de Corea del Sur, campeón asiático, ante el Al–Duhail Sports Club, equipo catarí que juega invitado.
A las 15.00 sí se va a poner buena la cosa. La semifinal entre Tigres, representante de la Concacaf, y Palmeiras, recientemente campeón de Sudamérica, prometen un interesante partido. Pero además de presuponer todo lo que pueda pasar con el fútbol, en la cancha es probable que haya dos uruguayos: Matías Viña es candidato en el lateral izquierdo del cuadro brasileño. El ex Nacional es número puesto por rendimientos, los que certificó siendo elegido en la mejor oncena de la Libertadores. En Tigres, por su parte, quien suele alternar entre titularidad y suplencia es Leonardo Fernández. El ex Fénix fue importantísimo en para que los mexicanos se quedaran con la Champions del centro y norte de América.
La otra semifinal tiene a Bayern Münich, campeón de Europa, ante el Al–Ahly, campeón de África. Los africanos tienen un muy buen equipo, pero parecen menos que la superpotencia alemana.
Tantos los partidos del domingo como Al–Ahly–Bayern, que se jugará el lunes a las 15.00, son televisados por Fox Sports.