La gente se amuchó detrás de las vallas que aseguraban la libre circulación de los ciclistas por el inicio de la ruta 26, en la esquina donde queda interrumpida por el cruce con la avenida General Leandro Gómez que, técnicamente, en ese tramo, es una continuación de la misma ruta. Primero se agolparon frente a la largada. Parecía una mañana tranquila, hasta que empezaron a salir los principales representantes del Club Ciclista Cerro Largo.
El primer estallido llegó con la partida de Agustín Moreira, ganador de Rutas de América en 2020. El segundo vino atrás de algún que otro grito que lo anticipaba: “¡Vamos, Gringo!”, le decían a Jorge Giacinti, ganador de Rutas de América en 2022. La explosión más grande de gritos, aplausos y vítores se la llevó el líder de la clasificación general: Matías Presa.
El Piojo, oriundo del barrio Las Acacias de Melo, se bajó de la rampa impulsado por un aliento que ningún otro ciclista recibió en la mañana del viernes. Era lógico: primero y en su casa, pronto para ganar su tercera Rutas de América tras coronarse en 2018 y 2019.
Tras la salida del líder, el último en largar en esta prueba individual, el vallado de la largada no tuvo más sentido y los presentes se movieron unos metros para colgarse detrás de la contención que armaba el túnel de llegada. Uno por uno fueron cruzando la meta los 118 ciclistas que partieron el viernes, y una moto de Policía de Tránsito anunció con su sirena el momento en el que Presa se acercaba a la meta, más de 40 minutos después. Gritos, festejos y la imagen de un hincha que se sacó la camiseta y la revoleó durante unos instantes para alentar a Presa en su paso, fueron las imágenes de los últimos 300 metros de competencia.
Liderazgo afianzado
El Club Ciclista Cerro Largo arrasó con la novena etapa de la 51ª edición de la carrera tradicional de semana de carnaval. El ganador del día fue Jorge Giacinti, el segundo Agustín Moreira y el tercero Matías Presa, pero en la general el uno-dos es para Presa y Giacinti, que tienen prácticamente abrochado el sexto título consecutivo para su club. A falta de dos etapas, la ventaja de más de un minuto y medio sobre el tercero de la general, Roderyck Asconeguy, que terminó el día en sexto lugar, le da al líder una tranquilidad grande para afrontar las dos etapas que quedan: Varela-Maldonado y Maldonado-Montevideo.
Los ciclistas vistieron equipación especial para esta etapa: body (malla entera), cascos de crono, ruedas lenticulares (tapadas), bicicletas de crono, caramañolas especiales y hasta el detalle de unas medias de goma por sobre el calzado “que hacen que el viento resbale”, según señaló Agustín Moreira. “Todo lo que se usa en la Contrarreloj es por aerodinámica, reduce la fricción por rozamiento y se gana tiempo y comodidad, para que, dentro del sufrimiento, podamos estar con la mayor cantidad posible de confort”, explicó el ciclista.
Piojo locatario
El nombre de Alan Matías Presa se escuchó durante toda la mañana en las bocas de los que se arrimaron. Bastó con caminar las primeras cuatro cuadras de repecho, o las últimas cuatro cuadras de bajada, porque el recorrido de la Contrarreloj iba y venía por la 26, saliendo de la ciudad y volviendo a entrar. “¿Ya viene el Piojo?”, “Hoy gana Presa”, “¿Cómo va el Piojo?”, era el murmullo constante.
Al costado de la calle, viendo pasar a los ciclistas, sentados en sus reposeras, cientos de ciudadanos melenses disfrutaban de la carrera que por unas horas disipó el tránsito habitual de camiones y automóviles. Jorge Leivas, vecino de la zona, dice que tiene una bici y sale a hacer ruta por ocio. Se acercó con su familia, como se acerca todos los domingos a ver las carreras locales. “La Contrarreloj es la élite del ciclismo, ahí es que se ven los buenos, y más en Rutas de América, que siempre hay expectativa”, expresó al tiempo que vaticinaba un buen tiempo para Presa.
En la puerta de una gomería, Germán comentaba: “El trabajo quedó totalmente cortado”. Seguidor del ciclismo, apoyaba a “la barra de Cerro Largo”, como todos los que salían de talleres mecánicos, herrerías, almacenes, un depósito de granos, otro de lana, y de las casas de familia. Como Raquel, que es de Melo y generalmente pasa Carnaval en su ciudad, por más que ya no vive en ella. “El ciclismo me encanta, para mí es uno de los mejores deportes”, decía el viernes por la mañana. Entre sus argumentos, el principal es que “es el más sacrificado” y resaltó a los protagonistas: “El que sufre, el que pasa el frío, el sol y la lluvia es el ciclista”. Y eso en Cerro Largo les emociona tanto como los cinco títulos seguidos que arrastran en esta prueba.
Al proyecto deportivo del club más ganador de los últimos años lo acompaña la intendencia, con un “proyecto económico y social que es la Zona Azul de la ciudad de Melo”, explicaba Sergio Botana, actualmente senador y antes intendente de Cerro Largo. Así se denomina la zona de estacionamiento tarifado en el centro de la ciudad. Todo lo recaudado por este servicio, que es administrado por el CC Cerro Largo, va a las arcas del club, para sostener al más profesional de los equipos uruguayos actualmente. A cambio, dijo el dirigente blanco, la institución tiene “la obligación de emplear personas con discapacidad o madres solas de hijos con discapacidades, y así se cumple también el objetivo social”.
El senador afirma que no hay desempleo de personas con discapacidad en la ciudad, y que quienes trabajan perciben un ingreso “relativamente bueno”. “La Intendencia controla el tránsito y que el club emplee a personas con discapacidades y son los propios ciclistas los que hacen el día a día de la administración del proyecto, al que el club hace funcionar muy bien”, aseguró.
“No soy muy del ciclismo”, aseguró Cristina, inspectora de tránsito de la Intendencia de Cerro Largo, pero, sin embargo, se emociona viendo a los pedalistas locales cuando le toca trabajar en las carreras. “Hay mucha gente a la que le gusta y siempre se juntan cantidad de personas”, comentó sobre los días de carrera.
Un rato antes, el jefe del cuerpo de inspectores nos había comentado algunas particularidades del operativo. “La crono es a ruta cerrada, por lo que no podemos permitir el ingreso de ningún vehículo ajeno a la competición”, señaló Gerardo Olivera. Para ello, es importante cuidar “el trasiego de las personas que vienen a pie, estar todos atentos de que cuando llegan los ciclistas no vayamos a tener ningún accidente”, aclaró. También permiten el cruce de vehículos en las calles perpendiculares en los momentos en los que ningún competidor está circulando.
Fueron 16 kilómetros de trayecto sobre los que hicieron guardia con el apoyo de Policía Caminera. “Nosotros tenemos 35 inspectores apostados, pero en total hay en el entorno de 60 o 70 personas trabajando”, calculó rápidamente, contemplando todas las distintas unidades dispuestas.
Ciclismo, carnaval, fútbol
“Acá es ciclismo y carnaval, y después el fútbol”, tiró Enrique, enumerando los gustos de la ciudadanía melense. Otros aseguran que el fútbol es lo más popular, pero nadie deja de mencionar las tres actividades como aquellas que el pueblo más disfruta.
Esta semana están de fiesta, porque los desfiles se prolongaron durante tres días en el fin de semana de carnaval y se viven nuevamente durante viernes y sábado del segundo fin de semana festivo. Además, habrá una última fiesta, que esperan para este domingo si se concreta el triunfo de Presa.
“Hay un desfile especial para ellos: se entra por la ruta 8 y transitan por Aparicio Saravia. Fiesta en la calle. La gente los está esperando desde el frigorífico en la ruta y los espera un coche especial para que ellos disfruten”, aseguró Esteban Alfaro, que nació y se crio en el mismo barrio que Matías Presa, a quien vio nacer y crecer. De festejos y de gloria deportiva él sabe en carne propia, porque era el lateral derecho de Cerro Largo la última vez que la selección fue campeona Nacional de OFI en 1998. A aquella fiesta la comparó con las que viven cada vez que el Club Ciclista vuelve con una copa.
Tomando una cerveza con un amigo, en el bar de la esquina donde un rato antes terminó la etapa, ambos recuerdan como especialmente multitudinaria la llegada de los ciclistas en 2017, cuando el argentino Matías Médici se anotó su tercera Rutas de América, su primera con el equipo arachán y la primera de las cinco consecutivas que ahora pueden volverse seis.
En el medio de tanto desfile, durante martes, miércoles y jueves, hubo concurso regional de murgas en el Teatro de Verano de la ciudad. Conjuntos de Rocha, Treinta y Tres, Maldonado, Salto, Mercedes, Fray Bentos y Tacuarembó le cantaron al pueblo melense que siguió disfrutando de la seguidilla carnavalera.
“Siempre las cuestiones de fútbol, ciclismo y carnaval son masivas, son un éxito acá. Hace años y años que estamos ganando Rutas de América y la gente acompaña masivamente”, remarcó Edward Machado, quien presentó todos los espectáculos en el Teatro de Verano y este viernes arengó al público presente al presentar el podio de la etapa del ciclismo. “Me gusta ver la respuesta de la gente”, dijo sobre su tarea, “lo importante es que vos veas que movés a la gente, cuando lográs eso y tenés la respuesta, que es el aplauso, ahí es cuando vos te sentís feliz y alegre”. Aplausos no faltaron.
Según Botana, “el carnaval en Melo lleva una inversión de 14 millones de pesos y tiene un retorno de seis millones de dólares en términos de incremento del nivel de actividad económica, que se reparten entre hoteles, restaurantes, estaciones de servicio, instituciones sociales que participan, y los dos o tres mil carnavaleros”.
“Vino gente de todos lados, de barrios que quedan a tres o cuatro kilómetros, a ver la llegada”, aseguró Enrique, que dejó el auto en la otra cuadra y con la cantora al oído iba relojeando los parciales de cada ciclista que llegaba a la meta 100 metros más allá de donde los veía pasar. Los observó desde las 9.00 de la mañana y se quedó hasta que la etapa finalizó, al mediodía, cuando se fue con el pecho hinchado de orgullo por el rendimiento de los suyos.
Alfaro siente que el ciclismo convoca porque todos son conscientes del sacrificio que implica. “Cerro Largo está abocado a la camiseta azul y blanca, y hoy por hoy el ciclismo nos hace muy felices y nos hace distraer de diferentes problemas y situaciones que cada uno vive en su vida personal”, dijo.
Malla blanca
“Continuar con la malla acá en el pueblo de uno da un plus. El podio, los tres primeros, creo es algo que va a quedar para el recuerdo en Cerro Largo”, dijo el Piojo tras bajarse de la bicicleta. “Tengo al mejor equipo del Uruguay que me respalda y voy a tratar de defender esa malla y disfrutar los dos días que quedan”, aseguró. Vestido de líder, valoró el apoyo de la gente, del barrio y de todo Melo: “Cuando la gente se arrima a la ruta da una energía extra y ayuda un montón para el físico”.
Presa está a punto de ganar su tercera Rutas de América, para acompañar a Carlos Alcántara, Federico Moreira y Matías Médici como los más ganadores de la historia. “Para mí es un sueño. Después de estar sancionado dos años, volver, hacer un esfuerzo grande y encontrarme nuevamente con el nivel que había estado, me tiene contento y agradecido con mi familia, con mi pareja, que es parte de mi equipo, y ojalá que ahora salga todo bien hasta el domingo”, comentó.
Reveló que los dos años de sanción por dopaje detectado en la Vuelta Ciclista de 2019 fueron bastante duros y le dejaron una enseñanza. Fue lo que en su momento calificó como “el peor error de su vida”, pero por consumir una droga social, no para obtener mayor rendimiento. En ese tiempo dejó la bicicleta de lado –“abandoné, salía cada tanto” –, pero se dijo que iba a volver y más fuerte que nunca. “Me sacrifiqué, volví con todas las ganas y aunque el año pasado no encontré mi nivel, sabía que este año lo iba a encontrar porque me lo puse en la cabeza, y el objetivo era Rutas de América”
El malla blanca cruzó la línea de llegada, la lluvia se descolgó enseguida y, si bien algunos se disiparon para buscar resguardo, fueron un par de cientos los que quisieron quedarse a ver el podio. Machado, micrófono en mano, valoró la alegría doble del triunfo y de la caída del agua, “que tanto nos hace falta”.
Este viernes en Melo, la ciudad en la que llueven triunfos, las mallas de todos los colores se subieron a sus camionetas y ómnibus y emprendieron la ruta rumbo a Varela, para la próxima etapa. Atrás dejaron a los dueños de casa, festejando entre ellos arriba del podio, como si ningún otro equipo estuviese pedaleando estos 1.500 kilómetros de Rutas de América. El dominio en la Contrarreloj, como indicaban los pronósticos, fue total para los Cascos Azules del Club Ciclista Cerro Largo.
El líder que fue peón
Agustín Moreira abrió esta edición de Rutas de América como líder del Cerro Largo. En el camino, paró a orinar, el lunes 20 de febrero, en la cuarta etapa. En ese momento otros equipos atacaron, para apretar el paso y dejarlo fuera de la conversación en la clasificación general. Yuri Corbo, técnico del equipo, opinó el miércoles en conversación con la diaria sobre la decisión de sus colegas: “No fue leal, pero es válida”.
Este viernes, tras terminar segundo en la Contrarreloj, prueba en la que es especialista, Moreira se mostró “contento por el resultado del equipo y también en lo personal”, pero también expuso cómo se siente al respecto de lo sucedido: “Me tocó tener una desgracia, pero el deporte es así y automáticamente hay que cambiar el chip para pensar en el equipo”.
Sobre la incidencia dijo que “son cosas que pueden pasar” y añadió que, según entiende, “en la vida el único poder que tenemos es el de dominar lo que hacemos como individuos”. Por esa razón, Agustín dijo que se fija sólo en lo que él hace y cómo se maneja. “Lo que hacen los demás no se puede dominar. Hay reglas, se juega con ellas y simplemente estoy contento de cómo nos está yendo como equipo. Me quedo con el trabajo que hago y la alegría mía y de mis compañeros. Con lo demás no puedo hacer nada”.
“No nos podemos quedar pensando en lo que pasó. Es pasado. Hay que pensar en el futuro, creo que es el secreto para estar bien en el juego de la vida. Una de las maneras de jugar es apuntando siempre para adelante”, recalcó el ganador de Rutas de América en 2020.
Ahora debe completar su trabajo de peón, como lo definió Corbo, para ofrecerle sus piernas a la defensa de la malla de líder de Presa. Luego tendrá un mes para preparar la Vuelta Ciclista del Uruguay. “La vuelta es uno de mis sueños en mi carrera deportiva, sé que el equipo me va a respaldar. Nos queda terminar esta Rutas y un mes para tener una revancha que es lo que más quiero personalmente”, concluyó.
Clasificaciones de Rutas de América
Etapa 8 (Contrarreloj)
Pos | Ciclista | Club | Tiempo |
---|---|---|---|
1 | Jorge Giacinti | CC Cerro Largo | 41.52,61 |
2 | Agustín Moreira | CC Cerro Largo | 42.06,65 |
3 | Matías Presa | CC Cerro Largo | 42.41,52 |
4 | Hernán Muniz | CC Cerro Largo | 43.03,62 |
5 | Yecid Sierra | Náutico Boca del Cufré | 43.17,82 |
General individual
Pos | Ciclista | Club | Diferencia |
---|---|---|---|
1 | Matías Presa | CC Cerro Largo | — |
2 | Jorge Giacinti | CC Cerro Largo | 0.36 |
3 | Roderyck Asconeguy | Villa Teresa | 1.32 |
4 | Yecid Sierra | Náutico Boca del Cufré | 2.25 |
5 | Ignacio Maldonado | Unión 33 Vergara | 2.33 |
General por equipos
Pos | Club | Diferencia |
---|---|---|
1 | CC Cerro Largo | — |
2 | Náutico Boca del Cufré | 8.47 |
3 | Unión 33 Vergara | 9.40 |
4 | Villa Teresa | 15.08 |
5 | Paysandú Lil | 20.15 |