Una de las listas que participó en las elecciones para el Secretariado Ejecutivo de la Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP), la lista 18, rechazó “el accionar” de la Comisión Electoral de la federación, que, según explican en una carta dirigida a ese organismo, dejó de considerar válida un acta enviada por la filial Canelones Noroeste, que corregía un acta anterior y sumaba siete votos más al escrutinio. Las elecciones se desarrollaron entre el 9 y el 14 de noviembre en todo el país. En la carta, la lista 18 sostiene que el día del escrutinio, a las 15.40, la Comisión Electoral “consideró válidas las correcciones enviadas” por la comisión electoral de la filial, una vez que se detectó el error, pero aproximadamente a las 21.00, “luego de llegados los resultados de la última filial”, la Comisión Electoral de FUM-TEP “se cambia a los votos de la primera acta de Canelones Noroeste”, sin haber comunicado “en ningún momento que no se validaba la segunda acta”.
“Esto demuestra claramente un manejo especulativo de los resultados. Con la totalidad de las filiales escrutadas, se tenía a la vista que el resultado electoral daba 7 cargos para la lista 27-3-Praxis, 6 cargos para la lista 100 y dos cargos para la lista 18. También se tenía a la vista que si no se consideraba la segunda acta de Canelones Noroeste, la distribución de cargos cambiaba a 8 cargos para la lista 27-3-Praxis, 6 para la lista 100 y uno para la lista 18”, se menciona en la carta.
Para la lista 18, no se trata de “una cuestión de prolijidad o desprolijidad en los escrutinios ni en las actas enmendadas”, sino que es “un asunto político”, ya que no considerar la segunda acta implica que la lista 27-3 Praxis siga teniendo la mayoría absoluta en el Secretariado Ejecutivo de FUM-TEP, que tiene 15 integrantes. En cambio, si los siete votos son considerados las listas 100 y 18 acceden a esa mayoría absoluta en el organismo de dirección.
La carta de la lista 18 señala también que la mayoría en la Comisión Electoral de FUM-TEP la tiene la lista 27-3-Praxis, que resulta beneficiada por la no consideración de la segunda acta.
Según informó la FUM-TEP, en el orden docente, la lista 27-3-Praxis, encabezada por Elbia Pereira, obtuvo 5.793 votos; la lista 100, de Daysi Iglesias, 4.217, y la lista 18, encabezada por Carla Farías, 1.654. Por su parte, en el orden no docente, la 27-3-Praxis, encabezada por el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, consiguió 5.645 sufragios, y la 100, 3.443.
La carta finaliza exigiendo, “en aras de preservar la confiabilidad de la votación y garantizar la voluntad de quienes se expresaron a través del voto”, que con un criterio único se avalen todas las actas o que se haga un nuevo escrutinio en todas las filiales “que mandaron actas enmendadas”, para dar “cristalinidad y transparencia al acto electoral”.
Otra versión
Por su parte, el sábado la lista 27-3-Praxis emitió una declaración en la que se señala que después de recibidas las actas y computados los resultados de muchas filiales, “una de ellas vuelve a enviar la misma acta enmendada, con corrector, donde se agregan 7 votos”. “Ante ese hecho, el desconocimiento del origen de esos votos y la causa de la enmienda, la Comisión Electoral no admite esos votos y mantiene la validez del acta original”, dice el comunicado. A continuación asegura que el cambio “surge horas después, cuando queda en evidencia que los afiliados de cualquiera de las dos filiales de Canelones pueden votar fuera de su filial, y luego esos votos observados son remitidos a la filial de Canelones que corresponde para ser validados y escrutados”. Pero “este acuerdo no se cumplió cuando votos emitidos fuera de una de las dos filiales no fueron registrados como observados por la filial que los recibió”, ni fueron “enviados esos votos a la filial a la cual decían pertenecer los votantes para que fueran validados y escrutados debidamente”. La lista 27-3-Praxis sostiene que estos votos fueron abiertos “por una sola persona fuera de la mesa de la filial sin la presencia física de los delegados de las listas, y sólo con una comunicación por videollamada”, por lo que “se violentaron las normas electorales de la FUM-TEP, y de cualquier votación directa y secreta”.
La declaración termina haciendo énfasis en la “enorme participación” conseguida en las elecciones, que superó los 13.000 votantes, y destaca que “en medio de una campaña permanente por deslegitimar al movimiento sindical”, es “de orden” defender la democracia sindical, reafirmando su apoyo “a lo actuado por la comisión electoral que ha dado y da garantías de transparencia” a las elecciones.