Después de que la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes) presentara sendas denuncias en la Justicia penal y ante organismos internacionales contra el director nacional de Educación, Gonzalo Baroni, el sindicato dio una conferencia de prensa este viernes.
El vicepresidente de Fenapes, José Olivera, dijo que una primera conclusión que sacó el sindicato después de las declaraciones de Baroni, en las que consideró que el paro que se realizará el 15 y 16 de octubre es “terrorismo”, es que se trató de “un hecho de violencia política deliberado e intencional”. Al respecto, dijo que ello se basa en las declaraciones y manifestaciones públicas posteriores del jerarca del Ministerio de Educación y Cultura, que “han ratificado y han profundizado” sus dichos iniciales.
Desde Fenapes consideran agravante que se trata de un jerarca de un organismo del Estado y, en ese sentido, lamentaron que ningún actor del gobierno haya “corregido la inconducta”. Por su parte, marcaron que se trata del principal asesor del candidato nacionalista a la presidencia de la República, Álvaro Delgado.
Según Olivera, “no hay forma de asociar que el ejercicio de un derecho constitucional ratificado por Uruguay en convenios internacionales”, como la realización de un paro, “pueda llevarnos a un hecho de barbarie como es el terrorismo”. En ese sentido, consideró que se trata de “un intento más de criminalizar a la organización” sindical por parte de actores del gobierno. Al respecto, dijo que este tipo de hechos no se dan únicamente en Uruguay y que, por el contrario, en otros países de la región este tipo de discursos de autoridades de gobierno “van penetrando en el conjunto de la sociedad” y luego derivan en “hechos más graves”.
El vicepresidente de Fenapes planteó que el sindicato realizó la denuncia penal “con el mismo derecho” que el exministro de Defensa Javier García denunció a la organización de docentes en diciembre del 2021 y que luego Fiscalía archivó.
Además de una denuncia penal y de otra presentada ante la relatora de la Organización de las Naciones Unidas sobre el derecho a la libertad de reunión pacífica, Gina Romero, Fenapes definió ampliar la denuncia que ya tiene presentada ante el Comité de Libertad Sindical de la Organización Internacional del Trabajo.
Los motivos del paro de 48 horas
Emiliano Mandacen, secretario general de Fenapes, dijo que, contrariamente a lo dicho por Baroni, “una gran cantidad de sindicatos de la educación estarán movilizados el 16”, uno de los dos días en que Fenapes realiza su paralización. Al respecto, cuestionó a los “operadores políticos” que intentaron “introducirse en la interna” del movimiento sindical y dijo que ello fue “un franco error”.
En esa línea, Mandacen valoró que “la reacción totalmente destemplada y fuera de lugar” de Baroni “se debe a que no hay argumentos para rebatir la contundencia de lo que está pasando en el territorio”. “Hay pérdida de grupos en todo el país que afecta directamente las condiciones de aprendizaje”, dijo, en relación con uno de los motivos del paro, ya que Fenapes contabiliza 564 grupos menos en Secundaria en 2022 respecto de 2019.
Según explicó, esa política “ha fomentado en algunos sectores específicos el aumento de estudiantes por grupo”, lo que incide en la desvinculación de estudiantes “en contextos complejos”. En adición, dijo que los docentes viven con “especial sensibilidad” la proyección de grupos para el año que viene en Secundaria y agregó que ello repercutirá en cientos de docentes que el año pasado concursaron para lograr la efectividad. En ese sentido, dijo que si no se logra revertir la proyección a través de la movilización que se realizará el 16 de octubre, “está en peligro” la efectivización de unos 2.000 docentes.
Mandacen reclamó al gobierno que “respete la negociación de buena fe” y, por tanto, cuestionó que haya innovado en un área que estaba siendo abordada en la negociación colectiva. Respecto de este tema, dijo que “si se compromete el acceso al trabajo, se comprometen las condiciones de aprendizaje, porque no es lo mismo dar clases en un grupo de 20 o 25 estudiantes que en grupos que superen los 30 estudiantes”.
“El 15 y el 16 no son fechas para cercenar el derecho a la educación de los estudiantes, son fechas fundamentales para salir a hablar con las familias, para salir a hablar con las compañeras y los compañeros que aún están con dudas, para que sea una movilización impactante en todo el territorio”, sostuvo Mandacen. En esa línea, resumió que lo que se reclama son “cosas mínimas”, como “el acceso a los puestos de trabajo y las garantías máximas de que todos los estudiantes van a estar en grupos donde se pueda trabajar y se pueda desarrollar una formación integral” para ellos.