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Gabriela Salsamendi (archivo, febrero de 2025).

Foto: Ernesto Ryan

Primaria promueve las “planificaciones libres” y sin las planillas que impuso la transformación curricular a los docentes

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Gabriela Salsamendi defendió la libertad de cátedra y dijo que las planillas “descolocaron la mirada de la enseñanza” y de los aprendizajes, además de que trajeron “mucha carga burocrática”.

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Desde la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP) ya hay algunos lineamientos en marcha para paliar alguno de los puntos en cuestión de la transformación educativa, así como espacios para profundizar su discusión.

El foco ahora está “en la enseñanza”, y para eso la DGEIP apuesta, garantiza y promueve la libertad de cátedra; de esta manera lo narró la directora general de Educación Inicial y Primaria, Gabriela Salsamendi, en un video difundido en las redes sociales institucionales, que tiene el fin de difundir una resolución de Primaria que alienta a la libertad de cátedra y la “planificación libre”, según explicó a la diaria.

De acuerdo a la jerarca, durante el proceso de creación de la transformación educativa, el Consejo Directivo Central (Codicen) capacitó a los y las docentes para que sus planificaciones de las clases sean incluidas en una planilla, “con un menú desplegable, donde en cada una de las actividades que desarrollan en el aula los docentes tenían que elegir la competencia, la competencia específica” y otra serie de pasos a completar.

Para Salsamendi, llenar la planilla “lleva mucho rato” y le “quita el foco de lo importante, porque, más allá de saber y estar convencidas de la necesidad de planificar, queremos que eso sea el espejo de lo que la maestra va a hacer cada uno de los días, que recoja el plan, y no lleve horas de un menú desplegable que lo que hace es descolocar la mirada de la enseñanza, e incluso de los aprendizajes, para colocarlos en un lugar de mucha carga burocrática”, aseguró.

En ese marco es que, antes de asumir el nuevo equipo de dirección de Primaria, conversaron con la inspección técnica del subsistema para acordar que puedan promoverse “planificaciones libres, sin planillas”.

Recientemente, Secundaria y la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria llegaron a un acuerdo firmado en el que se garantiza y promueve la libertad de cátedra en dicho subsistema, respetando los planes vigentes. La Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de la Educación Primaria hizo una solicitud similar ante la DGEIP.

Respecto a la “libertad de cátedra” a la que también se apunta desde Inicial y Primaria, Salsamendi señaló que “está dada desde los marcos legales”, y que decirlo públicamente “coloca al maestro en el lugar de profesional, en donde estamos convencidas que tiene que estar”. “La libertad de cátedra supone libertad en el uso de metodología, nadie más sabe cuál corresponde y mejor aplica con los gurises que tiene cada maestra en el aula, porque no hay fórmulas mágicas que funcionen por igual, sino que se requieren diversas formas de enseñar dependiendo de las singularidades” de los estudiantes, manifestó.

Al mismo tiempo, la jerarca especificó que se crearon espacios de análisis conformados por ocho actores, entre sindicatos, docentes e inspectores, entre otros, para “revisar” parte de los contenidos programáticos de la reforma curricular de los niveles de Primaria, para luego ser elevados, idealmente en agosto o setiembre, a la órbita del Codicen, donde se estará analizando la transformación a partir de la síntesis que realizará la dirección ejecutiva de Políticas Educativas.

“Estamos empecinadas en estar cerca de la gente”, agregó Salsamendi sobre la impronta de su gestión, que tiene a Selva Pérez como subdirectora. En sintonía, contó que las autoridades de Primaria han mantenido diversas reuniones en el interior con distintos actores educativos, “en virtud de establecer tres atributos que queremos que tenga nuestra gestión: la participación, la confianza y la idea de construcción colectiva”. Asimismo, con lo que permite el presupuesto actual, ya que no supone un incremento, habilitaron recursos para la realización de salas en las escuelas que no estaban pagas, para que los docentes puedan reunirse.

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