La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito presentó ayer, por octava vez, en el marco del Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, el proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) ante el Congreso de la Nación.
El proyecto se aprobó en marzo durante una plenaria que se hizo en la ciudad de Córdoba. Desde distintos puntos de Argentina viajaron 190 activistas representantes de 30 regionales de la Red de Profesionales de la Salud por el Derecho al Aborto, Socorristas en Red, la Red de Docentes por el Derecho a Decidir y la Colectiva Disidente Sexo-Género Política.
Durante una entrevista de Futurock con Estefanía Pozzo, Celeste Mac Dougall, integrante de la Campaña, dijo: “Además de que se apruebe el proyecto de ley, seguimos exigiendo que se cumpla la consigna ‘educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar’. Queremos que haya efectiva aplicación de la Ley de Educación Sexual –que está siendo atacada por la campaña ‘Con mis hijos no te metas’– y que se aplique con perspectiva de género en todas las escuelas, además de capacitación para los docentes y mayor presupuesto. También exigimos que se repartan anticonceptivos y el efectivo cumplimiento de los abortos que ya son legales en nuestro país”.
La marea verde estuvo acompañando toda la jornada. Hubo actividades en Buenos Aires, dentro y fuera del congreso. “Hubo mesas de debate en relación a los artículos del proyecto para que el conjunto de la sociedad que quiera participar sepa de qué se trata y lo pueda debatir. También hubo distintas actividades a lo largo y ancho del país”.
Estos son algunos puntos destacados del proyecto de ley:
Derecho a la interrupción del embarazo para las mujeres y otras identidades con capacidad de gestar, en el marco de la ampliación de derechos respecto del reconocimiento y respeto de la identidad de género de cada persona, entendida como la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente, la cual puede corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento.
Estas personas podrán acceder a un aborto voluntario, legal y seguro hasta la semana 14 de gestación en los tres sectores del sistema de salud (público, de seguridad social y privado), de forma gratuita en hospitales y centros de salud públicos y con una cobertura de 100% si tienen obra social, mutual o prepaga; además, el proyecto propone que la práctica sea incluida en el Plan Médico Obligatorio.
Más allá del plazo de las 14 semanas de gestación, las mujeres y otras identidades con capacidad de gestar tendrán derecho a acceder a la interrupción legal del embarazo en caso de violación o si corre riesgo su vida o su salud integral, esta última entendida como el estado de completo bienestar físico, mental y social (tal como la define la Organización Mundial de la Salud).
La completa despenalización de las personas que deciden abortar, y la no inclusión de la objeción de conciencia, ya que consagra esta práctica de salud como un derecho, cuyo ejercicio no puede negarse ni vulnerarse por creencias o posiciones personales, religiosas o morales.
Se reforzó el artículo que establece el acceso a la educación sexual integral y a la anticoncepción.