El viernes renunció el ministro de Turismo, Germán Cardoso, en medio de fuertes cuestionamientos por compras directas de publicidad oficial objetadas por varios organismos de contralor. Es el cuarto ministro del gobierno que se aleja de su cargo, tras Ernesto Talvi, Carlos María Uriarte y Pablo Bartol. Para motivar a los ministros que aún forman parte del gabinete, el presidente Luis Lacalle Pou decidió establecer un premio para el último de los designados a comienzos de la administración que quede en su cargo. “Sabemos que la gestión gubernamental es una actividad desgastante y por momentos muy frustrante. Por eso decidí que el último ministro que quede en pie se va a llevar un premio que consiste en un auto cero kilómetro y un viaje a Punta Cana para dos personas, con todos los gastos pagos”, anunció el mandatario.
Con respecto a la posibilidad de que algunos de los ministros cesados o que pierdan su cargo en un futuro puedan regresar al gabinete, Lacalle Pou se mostró cauto. “No sería justo para todos los que estén en carrera por el premio mayor sin haber salido en ningún momento. Este es un gobierno serio. No queremos manipular las reglas del juego a nuestro antojo. En todo caso, cuando quede un último ministro, entregamos el premio y empezamos una segunda temporada del concurso, con la posibilidad de que cualquier ministro pueda volver a su cargo y pelear por el premio mayor. Reitero: este es un gobierno serio, y los gobiernos serios tienen que ser estables y confiables”.