Cada 20 de noviembre se conmemora el día del policía caído en cumplimiento del deber. El Sindicato de Policías Agremiados Canarios (Sidepac) propone que se sume a esta conmemoración a los policías que se han suicidado, ya que, para esta organización, “son caídos en el cumplimiento del deber” porque “el Estado no estuvo presente cuando ese compañero precisaba, el instituto policial no estuvo cuando ese compañero lo requería”.
La tasa de suicidios en la Policía triplica la tasa de la población general, lo que ha sido denunciado por varios sindicatos que han pedido atención en salud mental urgente.
En diálogo con la diaria, el dirigente de Sidepac Rudeber Buela explicó que esta es una iniciativa del sindicato para “poder tener esa reserva de memoria también para los compañeros que se quitaron la vida porque son compañeros que tuvieron la necesidad de que el Estado, de que la propia institución policial se acercara de algún modo y los contuviera, ya que en ningún momento les brindó el entrenamiento ni les brindó la capacitación ni la contención suficiente y necesaria para afrontar la tarea de ser policía”.
Además, consideran que “han sido todas bajas que en su gran mayoría podrían haber sido evitadas de haber existido políticas concretas y directas sobre el problema y más humanas”. En este sentido, entienden que “la institución policial adolece de la carencia fatal de una política estructurada sobre la salud mental y eso está haciendo que nuestros compañeras y compañeros estén tomando esa decisión en algunos casos, pero creemos siempre que son circunstancias que en la mayoría de los casos se pueden evitar instalando procesos de trabajo que permitan a la persona manejar todos esos factores que le pueden estar generando problemas serios a su salud mental, y esto no sucedió, y el Estado tiene que tener una reserva de memoria para todos esos compañeros, porque no pueden quedar olvidados en el sistema”.
Así es que creen que “el día de la conmemoración de los caídos en acto directo de servicio es importante, es algo necesario, pero también creemos que estos compañeros tienen que ser recordados porque eran policías que cayeron, nada más ni nada menos, y nosotros no podemos dejarlos en el olvido porque sí; seguramente alguna cosa de su vida funcional -si no gran parte de ella- ha sido lo que ha generado en la vida a esas personas ese círculo, esa espiral viciosa que los llevó a ese lugar”.
Por eso, “nosotros proponemos hace mucho tiempo en todos nuestros comunicados que son caídos en acto directo del servicio, además por la indivisibilidad de la función policial que nos hace policías las 24 horas”. “Entonces, como lo digo, la reserva de memoria en este caso también es importante y sería un gesto importantísimo de parte del Estado comenzar a ponerlo sobre la mesa para las familias de los compañeros caídos y para los propios compañeros que están quedando, que saben y sienten que la pérdida es irrecuperable y que no hay vuelta atrás”, concluyó.