Humor para todo el año
Los Informantes hicieron TV, radio y prensa (publicaron en este mismo medio durante 12 años). Ahora, sale su primer libro. O más bien, almanaque, modelado en los que publica el Banco de Seguros del Estado. El esquema heterogéneo de Almanaque Mundial del Uruguay ($ 490, Penguin Random House) le permite al equipo liderado por Martín Otheguy e Ignacio Alcuri recurrir a una multiplicidad de formatos y atacar innumerables temas. Imposible que alguno no haga reír, pero lo más probable es que sean muchos, o que la combinación de registros y guiños termine por hacer estallar la carcajada.
Inspirados en el National Lampoon, pariente atrevido de la revista Mad, Otheguy y Alcuri proponen una entrevista a un resucitado Obdulio Varela, una dossier sobre el Mundial 2030, un calendario floral comentado por un redactor de Playboy, un cuento perdido de Horacio Quiroga, una lista de los caballos de carreras uruguayos más exitosos de la historia, un santoral que incluye todos los meses un Día del Trabajador Municipal. En la montonera se cuelan un montón de contenidos que podrían tildarse de “incorrectos” y que la calidad y el tono autoparódico redimen sin drama. De fondo, hay una inusual mirada distanciada de nuestro presente inmediato y mediato, y una serie de opiniones novedosas sobre nuestra idiosincrasia.
Novela y estructura
Consolidado y consecuente, Horacio Cavallo ha publicado, además de narrativa infantil y poesía, una serie de novelas (Oso de trapo e Invención tardía) y libros de relatos (El silencio de los pájaros) en los que la imbricación de distintas tramas ocupa un lugar central. Su nueva novela, Casa en ninguna parte ($ 420, Criatura Editora) también divide su atención en dos historias interconectadas, en este caso, por Eduardo, un padre de familia conflictuado. El contraste simbólico entre ambientes urbanos y rurales, como también suele ocurrir en la obra de Cavallo, tiene su lugar en esta historia bífida con vuelta de tuerca final.
Ibero Gutiérrez rescatado
El sexto volumen de la colección Lo que los archivos cuentan, de la Biblioteca Nacional, está mayormente dedicada a Ibero Gutiérrez, el escritor, artista visual y militante asesinado en 1972, y es parte de un esfuerzo que la institución, que custodia sus papeles, viene realizando desde hace una década.
El arte de Ibero Gutiérrez fue poco en su momento –tenía 21 años cuando lo mataron–, pero las investigaciones recientes, encabezadas por el poeta y profesor Luis Bravo, lo han recolocado como un nexo impensado entre el mundo de la política y el arte de vanguardia, entre el arte local y las tendencias del mundo desarrollado. Bravo es uno de los contribuyentes en esta publicación de la Biblioteca, con dos artículos (“Experiencia surrealista, embriaguez, iluminación profana: poéticas de la liberación en Walter Benjamin en Ibero Gutiérrez” y “Poéticas contraculturales uruguayas: el grupo Vanguardia y Los Huevos del Plata”), así como Alejandra Dopico (con un estudio sobre la dramaturgia de Gutiérrez), el colectivo Dar Vuelta Todo y Carina Blixen, coordinadora del volumen, que se ocupa de la recepción, en distintos momentos, de la obra del autor. Además, hay contribuciones sobre el contexto del 68 de Carlos Demassi, Camille Gapenne, Alfredo Alzugaray y Néstor Sanguinetti.
La publicación, además, viene acompañada de un libro: una edición revisada de Los mundos contiguos, una antología de la poesía escrita por Ibero Gutiérrez en 1968 y 1969, que Blixen decidió publicar con los ajuste mínimos –y no rodeada de un estudio genético, como es habitual en la colección– para contrarrestar la poca circulación que han tenido los textos originales. Es una elección acertada, porque se trata de versos que irradian juventud y caminos abiertos, y que se bastan por sí mismos para mostrar del autor, su época y sus esperanzas.
Stephen King eterno
Clásico en la franja que va del horror al misterio, el estadounidense Stephen King –quien no lo conoce por sus novelas lo conoce por las películas: It, Christine, El resplandor, Cementerio de animales– acaba de agregar uno más a su cincuentena de bestsellers. El visitante ($ 560, Penguin Random House) une lo detectivesco y el miedo profundo en una trama que tiene a un espantoso crimen infantil como disparador, a un sospechoso en apariencia intachable y coartadas insospechadas. Guiñadas políticas y crítica social en paralelo, la historia atrapa como atrapa King.
Trump por Woodward
Bob Woodward ya volteó un presidente: junto con Carl Bernstein escribió la serie de reportajes para el Washington Post conocida como Watergate, que en 1974 terminó con el mandato de Richard Nixon. Tal vez menos conocidos por aquí sean sus libros sobre George Bush, Bill Clinton y Barack Obama, entre otros presidentes a los que perfiló. El último, Miedo: Trump en la Casa Blanca ($ 560, Penguin Random House), habla, claro está, sobre el actual mandatario estadounidense.
Promoción no le ha faltado: en los días en que se publicaba, Woodward dio a conocer una conversación en la que Donald Trump le manifestaba su pena por no aparecer entrevistado en la investigación, al tiempo que el periodista le aseguraba haberle pedido un encuentro repetidas veces. Además, en esos días The New York Times publicó una nota de opinión sin firma que aseguraba que existe una red de funcionarios de la Casa Blanca que se dedican, por deber patriótico, a obstaculizar ciertas decisiones extremas del presidente. Con esa misma noticia, pero brindando nombres concretos –Rob Porter, secretario de personal, y Gary Cohn, director del consejo de economía– abre la nueva investigación de Woodward.
Las conexiones de Trump con Rusia y sus problemas con la justicia, la interna del gabinete, la importancia de los vínculos familiares, las dudas del Partido Republicano y los verdaderos aportes conceptuales de asesores como el ultraconservador Steve Bannon son también parte del trabajo. El estilo de Woodward, como desde hace tiempo, se basa en la reconstrucción de escenas –con abundancia de diálogos– a partir de testimonios reservados. ¿El resultado? Confirma todos los prejuicios que circulan sobre el presidente estadounidense –desnorteado, impulsivo, vanidoso, desinformado, contradictorio– y agrega otros.
Entusiasmo indemne
Revelación hace dos años, cuando ganó el Premio Nacional de Literatura, ahora la novela Entusiasmo sublime ($ 250), de Juan Estévez es editada ahora por Banda Oriental (antes lo había sido por Hum), con lo que ganó un prólogo de Martín Bentancor. El resto sigue allí: la historia del errante Iván, metido a milico por falta de opciones a principios de la dictadura, rockero, ácrata, bandido y dotado de una habilidad natural para zambullirse en mundos dispares.
Visita ilustre
Este lunes a las 10.00 en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Udelar (Uruguay 1695 y Magallanes), la española Anna Estany dará una conferencia sobre naturalismo, ciencias cognitivas y filosofía de la ciencia. Formada en Barcelona y California, Estany ha tenido la innovación y la creatividad como centro de sus investigaciones.