Este lunes, luego de que se hiciera público que el periodista Gabriel Pereyra denunció una orden de seguimiento en su contra por parte del Servicio de Inteligencia Policial y que detuvieron al jefe de custodia del presidente, Luis Lacalle Pou, por falsificar documentación para la expedición de pasaportes a ciudadanos rusos, la Mesa Política del Frente Amplio (FA) convocó a una conferencia de prensa en la Huella de Seregni.
Fernando Pereira, presidente del Frente Amplio, se refirió a las expresiones de Lacalle Pou, quien a pesar de manifestar su sorpresa ante la detención del jefe del Servicio de Seguridad Presidencial, señaló que el funcionario era “profesionalmente intachable”. Al respecto, Pereira recordó que “durante varios meses se publicó una cantidad de indagaciones” en la Justicia que tuvo Alejandro Astesiano, que acreditaban delitos cometidos en el pasado.
“En este caso, la Fiscalía pide la detención por la posible falsificación de pasaportes o de documentos que posibilitaron pasaportes rusos; si esto fuera así, no puede el presidente calificar ‘de funcionario intachable’ o 'de una conducta intachable’ porque no la tuvo ni en el pasado -en apariencia- ni la está teniendo en el presente, de acuerdo al pedido de detención de la fiscal”, expresó.
Para el FA, según dijo Pereira, se trata de un asunto que “el gobierno no ha aclarado, del que no hay suficiente claridad”. En esa línea, planteó lo mismo con respecto al caso de presunta vigilancia al periodista Gabriel Pereyra y al sindicato policial por parte de Inteligencia del Ministerio del Interior, así como no hubo claridad con la tramitación del pasaporte del narcotraficante Sebastián Marset. “Se le terminó dando el pasaporte por 10 años a alguien que estaba detenido por entrar con un pasaporte falso a Dubái”, criticó.
Sobre las acciones que tendrá la fuerza política, remarcó que para el caso de Pereyra ya se envió un pedido de informes al MI para esclarecer el asunto. “No olvidemos que entre 1985 y 2005 el fiscal Rodríguez demostró que hubo espionaje en democracia y esta podría ser otra faceta del espionaje en democracia”, expresó.
En el caso del jefe de custodia del presidente, dijo que el FA también cursará un pedido de informe, pero que considera que “el gobierno uruguayo y quien selecciona las custodias del presidente tienen la responsabilidad de explicarle a la sociedad uruguaya lo que sucedió, porque el jefe de Estado tiene que estar bien custodiado y porque la política de seguridad y de inteligencia tienen que estar coordinadas, cosa que parece no estar sucediendo en Uruguay”.