Desde las 17.00 del lunes compareció ante la Comisión de Presupuestos integrada con Hacienda una delegación del Ministerio de Ambiente (MA), encabezada por el ministro, Robert Bouvier, y el subsecretario, Gerardo Amarilla, para exponer sobre el proyecto de Rendición de Cuentas, todavía a estudio de la Cámara de Diputados.
Al MA le corresponden 25 de los 442 artículos del proyecto presupuestal. En la exposición de motivos del proyecto, el Poder Ejecutivo sostiene que su “compromiso” por “fortalecer la gestión ambiental” motivó la creación del ministerio en 2020 y “se plasma también en esta Rendición de Cuentas donde se propone incrementar el crédito presupuestal”.
Al respecto, Bouvier sostuvo en conferencia de prensa que el Poder Ejecutivo “ha tenido una sensibilidad especial con el MA”. “Los recursos siempre son escasos, pero en este caso estamos conformes con la disposición del Ministerio de Economía [y Finanzas] en el aspecto de reforzar los recursos del MA en 54 millones de pesos”, expresó.
El refuerzo presupuestal se repartirá en “acciones e inversiones” para la gestión del agua y el saneamiento, el fortalecimiento institucional de la cartera, la gestión integral de residuos, acciones para la protección de la biodiversidad y la “consolidación” del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, según sostiene la exposición de motivos.
De acuerdo con Bouvier, el aumento previsto para la Dirección Nacional de Aguas (Dinagua) “es significativo”. Señaló que los recursos servirán para realizar “un estudio para una política integral del agua, que tenga que ver con agua pluvial, agua subterránea y las cuencas, para el cual estos recursos que están asignados ahora van a ser fundamentales”.
Bouvier también dijo que el MA es un ministerio “muy joven”, con “muchos pases en comisión y mucho personal contratado”, por eso “estamos encarando una reestructura funcional, estamos tratando de que todo el ministerio tenga una orgánica”.
En tal sentido, la diputada frenteamplista Sylvia Ibarguren reconoció que se trata de un ministerio que “se está armando”, con “varias dificultades en relación a los recursos humanos”. No obstante, afirmó que existe “una falta de congruencia entre la planificación y lo que se ejecuta”.
La legisladora de la oposición apuntó específicamente contra la Dirección Nacional de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos y la Dirección Nacional de Cambio Climático, que “han bajado la ejecución” presupuestal, a pesar de que “se dice que uno de los programas y los objetivos es el fortalecimiento en todo lo que tiene que ver con la conservación y la preservación de los recursos naturales, la mitigación y la adaptación al cambio climático”.
Aparte de la distribución de recursos, la Rendición de Cuentas establece algunas modificaciones a leyes vigentes. Por ejemplo, propone derogar el artículo 18 de la Ley 19.553, relativa al riego con destino agrario, que dispone que los contratos de suministro de agua deben inscribirse en el registro de la Dinagua.
Asimismo, el proyecto establece que el MA será el encargado de determinar qué especies “podrán ser objeto de caza, pudiendo indicar las condiciones para dicha actividad y la duración de los períodos de caza”. Actualmente, esta facultad le corresponde al Poder Ejecutivo, sin especificación. Está previsto que la Rendición de Cuentas se vote el 8 de agosto en comisión y el 14 de agosto en el plenario de la Cámara de Diputados.
Proyecto Neptuno
Por otra parte, consultado sobre el proyecto Neptuno, que pretende la construcción de una planta potabilizadora en el departamento de San José y cuya licitación está en curso, Bouvier señaló que el estudio de impacto ambiental “todavía no se está llevando a cabo”. “Lo que sí tenemos son insumos que van a ser considerados cuando se haga la evaluación de impacto ambiental, y lo que estamos haciendo es ser receptivos a distintos estudios que están apareciendo”, señaló; y manifestó que el proyecto Neptuno se va a realizar porque “es una decisión estratégica que tiene el gobierno”.
Bouvier sostuvo que la ausencia de un análisis ambiental es lo normal en esta etapa del proyecto. “Siempre se plantea de la misma forma, o sea, son iniciativas privadas que, cuando ganan la licitación, presentan ese estudio de impacto, [que después] el MA lo evalúa con la rigurosidad que lo ha hecho hasta ahora”, expresó.
Consultada al respecto, Ibarguren dijo que “es parte del proceso”. Para el Frente Amplio, sostuvo, no hay preocupación sobre el estudio de impacto ambiental: “Nosotros confiamos mucho en esos procesos, porque realmente las evaluaciones de impacto ambiental dentro del MA son muy sólidas”.
La diputada frenteamplista dijo que la preocupación de la oposición responde a que el proyecto Neptuno “no resuelve el problema para el cual está diseñado”. Aseguró que durante los meses de verano, “que es cuando hay disminución de los recursos hídricos” en la zona metropolitana, el nivel de salinidad “aumenta en la zona”.