Hechos acontecidos hace más de diez años en la interna de la Fiscalía vuelven a ocupar el centro de la agenda pública por estos días: por un lado, aparece el fiscal especializado en crímenes de lesa humanidad, Ricardo Perciballe; por el otro, el prosecretario de la Presidencia, Jorge Díaz. Ambos se desempeñaban en el área de crimen organizado, Perciballe como fiscal y Díaz como juez, hasta que este último asumió como fiscal de Corte, el 17 de abril de 2012. Tiempo después, el 10 de mayo, el jerarca del ministerio público tomó la decisión de que Perciballe dejara la fiscalía especializada para continuar su carrera en una sede civil.
Esto último, según recoge la prensa de la época, generó malestar en Perciballe, que apeló la resolución entendiendo que había “motivos espurios” y “personales” de Díaz detrás de la decisión. Finalmente, y según reconoció el propio fiscal recientemente en el programa de streaming Al weso, luego de ir al Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA), el organismo le dio “la razón” respecto de los cuestionamientos que hizo sobre su traslado.
En la misma entrevista, Perciballe recordó que el traslado decidido por el hoy prosecretario de Presidencia le ocasionó “un problema muy grande” de salud, en particular de su salud mental, y también familiar. “Fue para mí muy grave, muy triste”, apuntó el fiscal, que recordó el hecho como “la primera medida” de Díaz, quien “sabía que tenía varias investigaciones en curso”.
“Hay personas involucradas, había posibilidades de pedidos de procesamientos y fui sacado de los casos”, profundizó Perciballe. Consultado sobre si conocía los verdaderos motivos de Díaz para la decisión, admitió conocerlos, aunque añadió que “es difícil decirlo”. En aquel entonces, en diálogo con la diaria, calificó lo que le sucedió de “bastante llamativo”. En ese momento, también reconoció en diálogo con Subrayado la posibilidad de que sus actuaciones en el caso que investigaba por un presunto delito de conjunción de interés público y privado al exsecretario de la Presidencia y excanciller Gonzalo Fernández “hayan molestado” a Díaz.
Un día antes de que Perciballe fuera notificado de su traslado, el propio Fernández había presentado un escrito ante el Juzgado Penal Especializado en Crimen Organizado, en ese momento divulgado por Búsqueda, en el que denunciaba “irregularidades cometidas en el curso de la instrucción” de la investigación fiscal.
Los otros casos de Perciballe
Más allá del caso Fernández, el fiscal tenía en aquel primer semestre de 2012 otras cinco causas de peso: investigaba irregularidades en los cementerios de la Intendencia de Montevideo, la facturación de horas del servicio 222 en la Jefatura de Policía de la capital y también una presunta organización delictiva en la órbita de la Dirección Nacional de Aduanas.
También indagaba una denuncia presentada en 2009 por la Federación Nacional del Juego por el acuerdo entre Casinos del Estado y la empresa Vidaplan, razón social del hotel Mantra, por la instalación de una sala mixta en el hotel Nogaró de Punta del Este. En el marco de ese expediente declararon exjerarcas del Ministerio de Economía y Finanzas durante la primera administración de Tabaré Vázquez.
Aunque sin demasiada trascendencia en la opinión pública, Perciballe también se encontraba trabajando en cuestiones vinculadas al velero Traful, hallado en 2011 con 444 kilos de cocaína de máxima pureza en Puerto Madero, Buenos Aires, y que tenía como destino final el puerto de Piriápolis.
Acciones legislativas
Algunos días después de publicada la entrevista en la que Perciballe recordó estos hechos, el senador nacionalista Javier García llamó la atención sobre su gravedad. Luego de haberse manifestado en la red social X, el legislador declaró este lunes en una rueda de prensa que “son afirmaciones muy graves” porque hacen referencia a que se tomó una “decisión voluntaria” de sacarlo de una investigación en la que “tenía procesamientos en vista”.
En la tarde del lunes, García y el senador colorado Andrés Ojeda remitieron al presidente de la Comisión de Constitución y Legislación de la Cámara de Senadores, Nicolás Viera, el pedido de convocatoria a Perciballe. El espíritu del llamado, según manifiesta el escrito, al que accedió la diaria, es que el fiscal brinde más detalles sobre sus “declaraciones públicas” que “involucran decisiones” tomadas por Díaz que “habrían obstaculizado investigaciones vinculadas al crimen organizado, corrupción, lavado de activos y narcotráfico”.
Consultado por la diaria, Perciballe confirmó que irá a la comisión si es notificado del pedido de los legisladores. “Obvio que concurriré. Será un honor”, manifestó. Además del llamado a comisión, García y Ojeda cursaron también un pedido de informes al Ministerio de Educación y Cultura para que este lo remita a la Fiscalía General de la Nación. Con el centro en las declaraciones de Perciballe, se solicitan detalles sobre el “historial de traslados” del fiscal, así como sobre “resoluciones y motivos” de cada uno de ellos. Los legisladores también muestran la pretensión de acceder al “historial de sanciones” de Perciballe, así como a “recursos” presentados por él “contra las resoluciones de traslado”.
Desde el oficialismo, la senadora Bettiana Díaz señaló en una rueda de prensa que la situación suscitada luego de las declaraciones de Perciballe “debería tener otro ámbito de resolución”, por fuera del Parlamento, y consideró que “falta diálogo entre los involucrados”.