Sin avances en la negociación, el conflicto del supergás se profundiza. Este jueves la Asociación Laboral de Funcionarios de Acodike Supergás (Alfas) se declaró en huelga en reclamo del reintegro de los trabajadores despedidos y “contra la represión sindical”, que denuncian sufrir de parte de Acodike. La medida se da en el marco de la intensificación de las acciones del sindicato en contra de la empresa por “falta de respuesta” y voluntad real de Acodike para destrabar el conflicto, sostuvo a la diaria el presidente de Alfas, Andrés Guichón.
El conflicto en el supergás se originó a finales de marzo, luego de que Acodike y Riogas despidieran a 48 trabajadores de la planta de envasado, entre ellos, 34 tercerizados y 14 efectivos. Guichón señaló que hasta el momento la empresa sólo reincorporó a cinco de los efectivos. En tanto, otros trabajadores “han conseguido otra opción laboral”; sin embargo, aún permanecen sin trabajo “unos 13, 14”, que siguen reclamando sus puestos.
El presidente de Alfas señaló que esta situación no ocurre por falta de trabajo, porque desde marzo en adelante “ha ingresado mucho más personal del que ha sido despedido”; pero la diferencia es que no son trabajadores sindicalizados. En esa línea, manifestó que lo único que ha demostrado Acodike a lo largo de este conflicto es su “ambición por destruir el sindicato”; “ese el principal objetivo de la empresa”, enfatizó.
Guichón dijo que la empresa mantiene una postura “inamovible” en relación al reintegro de los trabajadores. Por ese motivo, apelan a la “voluntad política de las autoridades del Poder Ejecutivo” para avanzar en la negociación. En ese marco, recordó la instancia, del 5 de julio, en la Comisión de Legislación del Trabajo y Seguridad Social de la Cámara de Diputados, donde los trabajadores pidieron la intervención de las autoridades porque la empresa “estaba violando algunas leyes”, como sancionar a trabajadores por tomar medidas sindicales.
Asimismo, sostuvo que este jueves, en el marco de la huelga, “hay trabajadores tercerizados cubriendo nuestros puestos de trabajo, algo que también es ilegal”. El presidente de Alfas también denunció situaciones de violencia “con afiches de familiares de trabajadores sindicalizados” y “algunas situaciones más que son graves, con la complicidad de la empresa”. Guichón relató que después de que se definiera declarar la huelga el lunes, el martes por la noche en la cuadra de su domicilio tiraron “un montón de afiches con la cara de la mamá de mi hija”, y al día siguiente “se pegaron afiches dentro de la misma empresa, donde se señalaba que estaba haciendo política partidaria y algunas acusaciones más”.
Guichón dijo que cuando desde Alfas tomaron conocimiento de ese afiche, “un mismo jefe” de la empresa lo retiró y lo escondió para evitar la denuncia. “Cuando se lo pedimos nos dijo que había sido tirado a la basura, que no estaba”, relató. La situación se repitió este jueves por la mañana cuando se encontraron con afiches en los que se sostenía que Guichón “vendía trabajadores por política partidaria y que era un pedófilo tapado”. “Una situación gravísima que vamos a denunciar donde corresponde, pero también queremos hacerlo públicamente porque estas son las condiciones en las que hoy nos encontramos negociando”, expresó el dirigente sindical.
La idea de los trabajadores es mantener esta medida, en principio, por tiempo indeterminado: “Veremos, si hay negociaciones, cómo avanzan, para ver si esta medida se deja de lado o se profundiza”. En ese sentido, Guichón apuntó a la solidaridad de la población para recibir alimentos no perecederos para alimentarse tanto en la carpa en la que están instalados como para que los trabajadores puedan llevar a sus hogares, porque “ya son muchos días sin trabajo”. Por otra parte, el dirigente sindical destacó el apoyo de otros sindicatos durante este jueves y a lo largo del conflicto.
Guichón enfatizó que el conflicto no se va a destrabar mientras haya trabajadores sin trabajo, y que el único escenario posible para salir de esta situación es la reincorporación total de los puestos de trabajo. “No nos puede pasar que nos queden trabajadores en la calle sin ninguna solución”, expresó, y agregó: “Si hay algún trabajador que nos quede colgado por el camino, no es una solución viable”.