El 14 de julio, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) lanzó la campaña de sensibilización sobre seguridad laboral, la cual apunta a sensibilizar y concientizar al entorno laboral en su totalidad sobre esta problemática que continúa mostrando cifras preocupantes en nuestro país.
Además de representantes del MTSS, en la oratoria también intervinieron representantes del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) y de la Cámara de la Construcción del Uruguay (CCU).
Los spots de la campaña informan que en nuestro país ocurren 40.000 siniestros laborales al año y que un trabajador muere cada diez días por esta causa. A su vez, en lo que va de 2025 han ocurrido siete siniestros fatales en la industria de la construcción.
En su intervención, el titular del MTSS, Juan Castillo, señaló que la Inspección General del Trabajo y la Seguridad Social ha hecho 997 intervenciones en obras de construcción desde enero de este año. De estas, aproximadamente en 400 se consignaron en actas las denuncias de las partes, en 88 se hicieron clausuras parciales y en 17, clausuras totales.
Muchos de estos siniestros “podrían evitarse si se utilizaran las medidas de seguridad adecuadas”, sostienen los spots, y finalizan: “Si sos empleador debés suministrarlas, si sos trabajador exigilas y utilizalas. Tu trabajo más importante es proteger la vida. Cuidate mucho, por vos y por quienes te esperan”.
En diálogo con la diaria, Alejandro Ruibal, presidente de la CCU, señaló que la campaña surge con el objetivo de sensibilizar, pero sobre todo de concientizar: “Sensibilizar nos sensibilizamos todos cuando hay un accidente mortal o con heridos, pero concientizar implica una acción donde hay que poner más voluntad para lograrlo”.
“Esta problemática se da porque a veces no se hacen las cosas bien, porque no se trabaja de forma profesional en el sentido más amplio de la palabra, ni con las herramientas actualizadas, ni con los procedimientos y las capacitaciones adecuadas. Esto a veces falla en todo nivel, ya sea en el trabajador, en su entorno, en sus jefes inmediatos, etcétera”, afirmó.
Asimismo, Ruibal considera que la alta siniestralidad es una “responsabilidad colectiva”, pero subraya que “quien menos responsabilidad tiene es el trabajador accidentado”. “El trabajador a veces puede ser negligente o no cuidarse, esto es algo que pasa, pero son tantas las cosas que se pueden hacer antes de que pase un accidente que la conducta del trabajador es algo menor en comparación. Quienes tienen mayores responsabilidades de que esto suceda son los mandos, quienes diseñan el procedimiento constructivo, y, al final, quien tiene menos responsabilidad es el trabajador. Alguien arriba de él le dio una orden, alguien tiene que supervisarlo, alguien tiene que dimensionar el riesgo, alguien tiene que velar por que el trabajador tenga la capacitación necesaria, que estén los implementos de seguridad disponibles y en condiciones, etcétera”, aseveró.
Por su parte, el secretario nacional de Seguridad e Higiene del Sunca, Héctor Abad, expresó a la diaria que esta campaña se lanza con el objetivo de “generar conciencia en el mundo del trabajo, pero también en el entorno de los trabajadores”.
“Hace unos años, el Sunca, junto con los empresarios del sector y el gobierno, habíamos lanzado una campaña que decía ‘obra segura’. En nuestro entorno, cuando decíamos ‘obra segura’, llegábamos a la tarde a nuestros hogares y se hablaba de lo que pasó en televisión. Nuestras familias nos mencionaban lo que habían visto, nos decían que nos cuidáramos y nos daban recomendaciones. En este sentido, esta campaña actual tiene el objetivo de generar una influencia también en los lugares de los que venimos”, aseguró.
A su vez, Abad mencionó las dos etapas que tiene esta campaña: la primera apunta a sensibilizar y concientizar al entorno familiar del trabajador, y la segunda a la correcta implementación de las medidas de seguridad laboral por parte de quienes deben aplicarlas.
“Es importante llegar a todos los trabajadores, pero también que sus familias tomen conciencia sobre la problemática general que tiene el mundo del trabajo y que también sean parte de las recomendaciones a la hora de aplicar medidas de seguridad en el intercambio en una conversación familiar. Por otro lado, no solamente se apunta a la toma de conciencia en los lugares de trabajo, sino también a que otros actores involucrados en el mundo del trabajo lo hagan, por ejemplo, la inspección del trabajo y los empresarios, a través de la contratación de más servicios e implementos que brinden seguridad a los trabajadores”, sostuvo.
Factores que se entrelazan
El presidente de la CCU sostuvo que uno de los aspectos del mundo de la construcción que influyen fuertemente en la siniestralidad laboral es la informalidad, donde ya no pueden llegar a controlar, y asegura que esta es una “competencia desleal para las empresas formales”.
“El gran problema es la informalidad en todo sentido, y esto es algo que escapa de nuestra gestión. Muchas veces, cuando hay accidentes no podemos hacer absolutamente nada. Donde sí podemos actuar es dentro del mundo formal”, aclaró.
Y agregó: “Sabemos que también esto se da por la necesidad del trabajador de generar ingresos y no lo podemos culpar de trabajar en negro. Esto es un problema que ocurre en un porcentaje bastante alto”.
A su vez, Ruibal es consciente de que la informalidad es sólo uno de los factores que componen esta problemática y que la industria formal no está a salvo de estas desafortunadas situaciones: “no le atribuyo la siniestralidad a la informalidad, por supuesto que la industria formal también los tiene, pero todo se compone de una parte donde no podemos actuar y otra parte en la que sí podemos actuar y estamos obligados a hacerlo”.
Por su parte, Abad hizo hincapié en que uno de los factores que inciden en la alta siniestralidad que se viene registrando en nuestro país tiene que ver con que en los últimos años el MTSS “no ha controlado ni ha fiscalizado como debería hacerlo”.
“En nuestra industria se da que los trabajadores están muy poco tiempo en obra y hay una alta rotación porque las obras empiezan y terminan, y no están diez o 15 años, son tiempos mucho más cortos, por eso las tareas de los trabajadores suelen terminar muy pronto. Esto, indudablemente, genera inseguridad para los trabajadores porque aquellos que reclaman mejores condiciones de trabajo, cuando llegan los recortes, son los primeros en no ser más tenidos en cuenta, justamente porque son los que reclaman. Por lo tanto, esto hace que muchas veces no sean reclamados los implementos de seguridad de uso personal y colectivo”, aseguró.
“No es que a los trabajadores no les importe esto, los trabajadores van a trabajar, y cuando no tienen los mecanismos de seguridad y agarran un trabajo luego de mucho tiempo de estar buscando, tal vez algunas cosas las dejan pasar. Acá está la responsabilidad de quien tiene el poder de dirección de ese lugar de trabajo de que estén los elementos de seguridad, pero también de suministrarlos”, subrayó.
Todas las partes en conjunto
“Se necesita de todas las partes para poder avanzar, no tiene sentido dejar a una de ellas afuera”, asegura Abad sobre la importancia de trabajar de manera unida. El referente del Sunca destacó que en todas las administraciones ha habido trabajo conjunto entre el gobierno, las cámaras empresariales y los trabajadores en materia de seguridad laboral.
“Con las cámaras empresariales tenemos buena relación. Podremos estar discutiendo varias cosas, pero el diálogo nunca lo perdemos y hemos avanzado en varios aspectos. En temas de seguridad, y en otros aspectos, estamos discutiendo cosas en conjunto desde hace muchos años”, afirmó.
Por su parte, Ruibal también destaca el hecho de que en esta materia el sector privado se encuentre alineado con los trabajadores: “es algo que nos pega a los dos, nos duele en lo humano más que nada, pero también desde el punto de vista organizacional. El impacto que genera un accidente y la pérdida de una vida en una organización como un equipo de trabajo es terrible, todos sufrimos la pérdida”.
Además de lo humano, lo que para Ruibal está en primer lugar, también señala otras consecuencias de la siniestralidad laboral, como las pérdidas económicas o en la productividad.
Lo que se espera de la campaña
Ruibal afirma que cuando se hace una campaña de sensibilización y concientización “uno nunca espera resultados mágicos”. “Se trata de una especie de recordatorio con énfasis para todos los involucrados, empezando por los trabajadores para que se cuiden ellos mismos, pero también para todo el conjunto de la industria y todos sus actores”, subrayó.
Asimismo, el presidente de la CCU afirmó que “tomar conciencia no es algo que se hace de forma automática”, y es ahí donde se encuentra el “centro del tema”. Y agrega: “Me parece importante que para buscar la concientización se involucre al resto de la familia con esa idea de ‘cuidate por vos, pero también por tus seres queridos’”.
Por su parte, Abad sostuvo que es claro que el hecho de que un hijo esté esperando a su padre cuando llega del trabajo es algo muy sensible, pero también pone énfasis en que la campaña apunta a que se cumplan las medidas de seguridad.
“Uno de los temas que nos preocupan es que un fiscal [especializado] debería investigar de oficio sobre un siniestro. Por ejemplo, no puede ser que un trabajador pierda la vida como el que estaba trabajando en el comedor de la Universidad de la República, que no tenía el cinto de seguridad puesto, no tenía la cuerda, estaba trabajando a seis metros de altura y, todavía, arriba de una escalera. Estos fueron todos procedimientos donde fallaron las normas de seguridad. Debería haber una fiscalía que investigue los siniestros de trabajo, por ejemplo, en hechos como este, u otros donde un trabajador queda con alguna lesión gravísima. Debería investigar si se cumplieron con las normas de ese sector de trabajo, si el trabajador debería haber tenido el cinto de seguridad puesto, por qué no lo tenía”, señaló.
“Esperamos que en este presupuesto quinquenal el tema esté al menos en discusión. También esperamos generar conciencia en los lugares de trabajo, que los empleadores y los trabajadores apliquen las medidas de seguridad tal como están establecidas”, afirmó el dirigente sindical.
Y remarcó: “Hemos avanzado mucho en las negociaciones, pero si durante alguna administración, no importa de qué partido, no se aplican las medidas de seguridad, todo lo que podamos haber construido no servirá de nada”.