Buenos días. Les comento algunas noticias que pueden leer hoy en la diaria.
Es muy frecuente, en las controversias mediante redes sociales y en las secciones para comentarios de los portales con noticias, que cuando un hecho deja mal parado a alguien de un partido, se señalen otros hechos que dejan mal parados a sus adversarios. El procedimiento tiene defectos obvios, entre otras cosas por aquello de que el mal de muchos es consuelo de tontos.
Sería muy saludable que esta manera inconducente de discutir sólo se diera en los intercambios entre gente fanatizada o que milita, en forma honoraria o a cambio de alguna retribución, para incidir en la opinión pública con herramientas peligrosas. Lamentablemente, también se ha vuelto habitual entre dirigentes partidarios.
Dirigentes sindicales y del Frente Amplio (FA) han sostenido que las visitas de candidatos departamentales del Partido Nacional a escuelas en Artigas y Lavalleja, con participación de Lorena Ponce de León, violaron la laicidad. El debate pertinente se centra en considerar circunstancias y contenidos de esas actividades proselitistas, para ver si infringieron o no las normas vigentes, pero la senadora nacionalista Graciela Bianchi, en declaraciones a la diaria, no se limitó a opinar sobre eso, sino que además comentó que José Mujica y Lucía Topolansky “entraban a escuelas y liceos y hacían política con los chiquilines”.
A su vez, el senador Guido Manini Ríos fue consultado sobre información publicada el sábado por este medio, en la que se reveló que Guillermo Domenech, compañero suyo en la fórmula presidencial de Cabildo Abierto (CA) y ahora en la cámara alta, fue abogado sumariante en la dictadura y propuso la destitución de varios docentes. Manini dijo que no sabe si eso “responde a la realidad”, y se trata de una defensa bastante débil, ya que poco importa, para evaluar la conducta de Domenech, de qué está enterado el conductor de CA. Aún menos atinado, a tal efecto, es que el ex comandante haya agregado que su correligionario “pudo haber actuado en distintos organismos públicos en la época de la dictadura, como muchísima gente”, y haya puesto como ejemplo al ex presidente Tabaré Vázquez, o que haya sostenido que “el Partido Comunista quiso subirse al carro del golpe de Estado en febrero de 1973”.
Por otra parte, la candidata de la “coalición multicolor” a la Intendencia de Montevideo, Laura Raffo, denunció que se había intentado amedrentar a varias personas para que no la acompañaran en una recorrida por Tres Ombúes. Carolina Cosse, candidata al mismo cargo por el FA, comentó que si había ocurrido eso, le parecía mal, pero añadió que Raffo también debería preocuparse por “los desmanes que atentan contra la vida” de militantes frenteamplistas.
Hasta mañana.