Extrañamente familiar

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Vuelve al Teatro Victoria (Río Negro 1479, 29019971) un montaje del año pasado que seguramente no recibió la atención que merecía: Lúcido, de Rafael Spregelburd, dirigida con el ritmo justo por Marcel Sawchik, con un elenco conformado por Joaquín Mauad, Natalia Sogbe y Pablo Isasmendi, que no desentona pero en el que destaca el sensibilizador protagónico de Adriana Ardoguein. La obra narra los sueños lúcidos de Lucas (hijo de Teté y hermano de Lucrecia), una forma experimental de trabajar en forma terapéutica los problemas de vínculo con su madre. Ella, a la vez, muestra un apego exacerbado por su hijo y tiene un enfrentamiento permanente con Lucrecia, que volvió a casa para exigirle algo que desencadenará el conflicto. Las funciones son viernes y sábados a las 21.00 con localidades a $ 300.