El lunes 2 de abril comenzará la vacunación en 2.379 escuelas públicas y privadas de todo el país, informó el sitio en internet de Presidencia de la República. Los primeros barrios que recibirán a los equipos de vacunación serán Cerro, La Boyada, La Paloma, Santa Catalina, Casabó, Pajas Blancas, Abayubá, Paso de la Arena, Santiago Vázquez, Pocitos, Buceo, Malvín y Unión. Seis equipos técnicos cubrirán cerca de 12 escuelas por día para inocular con la triple bacteriana (contra el tétanos, la difteria y la tos convulsa) y contra el virus del papiloma humano (VPH), a los alumnos de sexto año. En este último caso, Claudia Romero, del Área Programática Salud de la Niñez del Ministerio de Salud Pública, reiteró que no se vacunará a las niñas cuyos padres o tutores indiquen que no quieren que eso se haga, y que los equipos pasarán dos veces por cada escuela, en esta primera recorrida que durará hasta mayo, y en los meses de octubre y noviembre para segundas dosis. “Esta estrategia de vacunación en las escuelas es producto de un colectivo que analiza las coberturas vacunales. Uruguay tiene una buena tasa de cobertura vacunal, pero siempre hay algunas poblaciones que están más vulnerables”, indicó Romero, refiriéndose a los adolescentes y preadolescentes.
Con cuidado
El “Colectivo ciudadano por la NO obligatoriedad de la vacuna contra VPH-Uruguay” emitió un comunicado en el que expresa su desacuerdo con la perspectiva de una vacunación masiva en las escuelas contra el VPH.
“La vacuna contra el VPH no es obligatoria. No permitan que vacunen a sus hijas si no lo desean. Jamás se les puede exigir dicha vacuna para el ingreso a ninguna institución educativa ni deportiva”, dice el texto. Aseguran que, además de no ser inocua, “no es una vacuna contra el cáncer de cuello de útero. Está diseñada para cuatro cepas del virus de VPH y existen más de 100 cepas, entre 15 y 20 de estas son consideradas de alto riesgo”.
También consideran que la vacunación “exclusiva de niñas es una decisión sexista”. “Entendemos como una actitud discriminatoria la decisión de vacunar exclusivamente a las niñas en las escuelas. Esta decisión va en contra de las políticas de género que deben ser estimuladas desde las autoridades. Los hombres también padecen y transmiten el VPH razón por la cual debería ser gratuita y encontrarse en los centros de salud disponible para niñas y niños, siendo los padres responsables de llevar a sus hijos, si lo consideran conveniente”.
El colectivo considera que es “una notable falta de ética” que el Ministerio de Salud Pública (MSP) omita en la información que envía a las escuelas los efectos adversos de la vacuna. “El [formulario para] consentimiento informado que el MSP está enviando a las escuelas, tanto públicas como privadas, con el lema ‘Vacúnate ganamos todas, ganamos todos’ insinuando una preocupación en clave de género, no describe efectos adversos, contraindicaciones, ni riesgos que las niñas pueden sufrir, sesgando de esta manera la información. Incluso exalta la seguridad de la vacuna, haciendo caso omiso a ampliar información disponible”.
Dicen que no se trata de un grupo antivacunas, ni son “ignorantes científicos, como lo proclama el vocero del MSP, el doctor Jorge Quian”. Quian, director general de Salud, dijo en octubre de 2017 que “no vacunar a los niños es una ignorancia científica”, según consta en el portal del MSP.