La semana pasada, un policía de 19 años se suicidó. Hacía tres meses que había entrado a la Policía. Hace unos meses, un compañero suyo de generación también se mató. Los sindicatos policiales han alertado una y otra vez la “urgencia” de la atención en salud mental y el “hostigamiento” de los mandos. Este fue uno de los temas centrales del último congreso de la Unión de Sindicatos Policiales del Uruguay (USIP).
Los sindicatos rechazaron que el Ministerio del Interior no le dé “prioridad” al tema y señalan que los múltiples suicidios muchas veces están asociados al “acoso laboral y sexual que hay en la Policía”. Los sindicatos también presentaron este tema al Ministerio de Salud Pública, en reunión con el ministro Daniel Salinas y con el subsecretario de la cartera, José Luis Satdjian. Por otra parte, la bancada de senadores del Frente Amplio cursó un pedido de informes al Ministerio del Interior en el que señalan que “el suicido de integrantes de la fuerza policial” es un “tema de alta sensibilidad”.
Este viernes se suicidó otro policía, que cumplía funciones en la Jefatura de Policía de Cerro Largo. El Sindicato de Funcionarios Policiales de Montevideo - Uruguay emitió un comunicado que reitera que “la problemática de la salud mental y suicidio en nuestra Policía atraviesa una emergencia y urgencia notoria, es necesario de inmediato el abordaje de la misma”.
“No son números los compañeros que se suicidan”, indica el texto. “Son padres, madres, hermanos, amigos que entran sanos a una institución que, muchas veces, es el detonante de estas decisiones”.
Finalmente, el sindicato advierte que “muchos están preocupados por las altas cifras de certificaciones, otros estamos preocupados por las ‘causas’ y en una política real de atención y prevención, sin perjuicios, ni económicos, laborales, ni mucho menos juicios de valor a quien necesita contención”.
En la misma línea se pronunció el Sindicato de Policías Agremiados de Canelones (Sidepac). A través de un comunicado planteó que “es hora de no mirar para el costado” y “de pedir responsabilidades”.
Según señalan, el suicidio es “una pandemia silenciosa que se extiende entre las filas policiales”. Y por eso, “tanto los sindicatos que están en la USIP como los que pertenecemos a la Coordinadora Nacional de Sindicatos Policiales, hemos golpeado diversas puertas en el transcurso de mas de diez años planteando esta problemática”, pero “sigue todo en lo mismo. En este sentido, entienden que “llegó la hora de que todos los sindicatos policiales del país tomen esta temática como principal reivindicación” y hagan “un llamado a la responsabilidad”.
“Nadie, pero absolutamente nadie se puede hacer el distraído con esta problemática. En un tiempo muy acotado se han producido tres suicidios”, resaltaron. “Es hora de crear un equipo multidisciplinario en calidad de urgente para que aborde de inmediato esta pandemia que nos esta aniquilando”, concluyeron.